Casi el 40% de los nacimientos se produce fuera del matrimonio

- Aunque los españoles desean tener al menos dos hijos, la media es de 1,4

- Tres de cada 10 niños en España crece sin hermanos

MADRID
SERVIMEDIA

El porcentaje de los nacimientos fuera del matrimonio alcanzó el 37% en España en 2011, la mayoría de ellos se produjo en el contexto de una pareja de hecho, según el informe ‘El déficit de natalidad en Europa. La singularidad del caso español’, publicado en la colección Estudios Sociales de la Fundación “la Caixa”.

España es peculiar en la fecundidad en este grupo de población. Según los autores del estudio, la cohabitación en nuestro país es “persistente y estable”, no como ocurre en otras sociedades donde las parejas conviven un tiempo como fase previa al matrimonio.

Estas tendencias y datos se desvelaron este jueves en la presentación de este documento en Madrid, en el que participó el director general de la Fundación “la Caixa”, Jaime Lanaspa, que aseguró que “Europa es un continente defensivo porque tiene una actitud vital menos rotunda que otras zonas que tienen una natalidad más potente”.

Lanaspa también se refirió al caso español. “Tenemos la costumbre de llegar más tarde, empezar más tarde y hacerlo más rápido”, dijo, en referencia a que las mujeres españolas retrasan la maternidad, pues el 18% de los nacimientos se produce en las mujeres de más de 35 años.

Asimismo, el trabajo también ahonda en que aunque los españoles desean tener al menos dos hijos, la realidad es bien distinta, provocando una “frustración” y acrecentado por el “déficit de bienestar” que también muestra el informe.

Mientras las mujeres nacidas en 1900 tuvieron una media de 3,4 hijos y las nacidas en 1965 tuvieron 1,6 hijos, la previsión es que el número final de la generación de españolas nacidas en 1975 seguirá siendo muy bajo, con 1,4 hijos.

Esto conlleva a que la pirámide plobacional corra “el riesgo de invertirse”, por lo que el sistema se rá “insostenible”, según destacó Lanaspa.

CUESTIÓN COLECTIVA

Durante la presentación, el coordinador del estudio y catedrático de la Institució Catalana de Recerca i Estudis Avançats (Icrea) de la Universidad Pompeu Fabra, Gosta Esping-Andersen, defendió que el tema de la natalidad noes una cuestión privada, sino un asunto “de interés colectivo” por dos causas: el progresivo envejecimiento de la población española (a final de siglo España será “un país bastante vacío”, predijo) y el déficit de bienestar.

En opinión del catedrático, las teorías que apuntan a la bajada de la fecundidad relacionadas con la incorporación laboral de la mujer y los nuevos valores postmodernos no coinciden con los datos. De hecho, el trabajo que ha coordinado demuestra que la fecundidad es más alta en sociedades de alto nivel femenino y que la mayoría de los hombres y mujeres tienen entre sus preferencias tener al menos dos hijos.

En este sentido, el coautor del estudio agregó: “Una minoría tiene como preferencia lo que hoy en día es una realidad, un 13 por ciento de españolas terminan hoy sin niños”. Este dato se puede comparar al 2% de mujeres que no desean tener descendencia.

“La fecundidad muy baja se concentra en las sociedades con más incertidumbre, con estados de bienestar más débiles y con familias más tradicionales, como ocurre en la Europa mediterránea y del Este”, destacó Esping-Andersen.

MÁS GUARDERÍAS

La profesora de Investigación en Demografía del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y también coautora del estudio, Teresa Castro, reivindicó que haya un mayor número de plazas de guardería para niños de 0 a 3 años para animar a los españoles a tener más hijos.

La investigadora destacó que tres de cada 10 niños en España crece sin hermanos, lo que supone que el 28% de las mujeres termina su edad fértil con un sólo hijo. “Podemos intuir que no se da un rechazo a la natalidad, sino que la fecundidad es baja porque es poco frecuente que se pase del primer al segundo hijo”, concretó.

Además, dijo que “España es un país muy tradicional que tiene unas pautas muy poco tradicionales”, por lo que “no hay una fóprmula mágica” ante esta situación “compleja”. Sin embargo, esto “no significa que no haya políticas que puedan influir”, en alusión a las iniciativas que la administración puede emprender de apoyo a las familias.

(SERVIMEDIA)
12 Dic 2013
AHP/pai