Garzón se refirió a este asunto durante una rueda de prensa en el Ateneo de Madrid, donde se presentó la plataforma “Convocatoria Cívica”, en la que distintas personalidades hacen un llamamiento a la unidad de partidos, sindicatos y organizaciones de izquierda.

Durante su intervención, el exjuez se quejó de la situación del país, algo que, a su juicio, se plasma en aspectos como los problemas de la Justicia y en cómo “se entorpece” al investigación de la corrupción.

Aseguró que mientras algunos critican los escraches a políticos en relación con la normativa hipotecaria, no se dice nada sobre “los escraches oficiales cuando se persigue a jueces y fiscales que luchan contra la corrupción”.

RECHAZAR PRESIONES

En este sentido, el exmagistrado fue también preguntado por las críticas que desde las fuerzas políticas se están dirigiendo a jueces como Pablo Ruz y Mercedes Alaya por imputar o encarcelar a acusados en el marco del “caso Gürtel” y “caso de los ERE”, respectivamente.

A este respecto, sostuvo que es “bueno” que haya críticas a los jueces, pero pidió “honestidad” a los políticos, en el sentido de que no censuren sólo a los instructores que toman decisiones en contra de sus formaciones políticas.

No obstante, el exjuez reclamó a los políticos un “cuidado exquisito” a la hora de hablar de investigaciones en marcha. Respecto a los magistrados que investigan la corrupción, dijo que tienen que “hacerse respetar con sus resoluciones” y no dejarse “presionar” o “coaccionar”. Concluyó que si estas condiciones no se cumplen, estaríamos ante un “mal funcionamiento” de las instituciones.

Asimismo, preguntado sobre la imputación de políticos y cuándo deberían éstos dimitir, Garzón dijo que la imputación es una “garantía” para el investigado y no puede ser un “estigma”. Sostuvo que, a su parecer, la dimisión debería producirse cuando se concreta a investigación a un cargo público determinado.