Fuentes populares confirmaron a Servimedia que Rajoy y Basagoiti tienen un acuerdo personal cerrado desde hace varias semanas para mantener la estabilidad del PP del País Vasco y evitar una crisis interna por la renuncia del líder.

Basagoiti anunció tras las elecciones autonómicas en Euskadi del pasado 21 de octubre, en las que el PP perdió tres escaños al bajar de 13 a 10 diputados, que no volvería a ser candidato a lehendakari, con lo que despertó una enorme incertidumbre en el partido.

Sin embargo, cinco meses después, Basagoiti permanece en el cargo como presidente del PP vasco y no tiene intención de dejarlo a corto plazo, según explicaron fuentes próximas.

Rajoy ha sido clave en la decisión final de Basagoiti, que tenía importantes ofertas para abandonar la política y marcharse al sector privado. Podría estar ganando mucho más dinero y con una vida más cómoda, pero por ahora prefiere quedarse ayudando a su partido.

La mayoría de sus compañeros le tienen tan alta estima que especulan con la posibilidad de que Basagoiti sea nombrado ministro cuando Rajoy decida remodelar su gabinete en el Gobierno.

HASTA LAS MUNICIPALES

La dirección nacional del PP da por hecho que Basagoiti, al que se considera un gran activo político dentro de la formación, permanecerá como presidente de los populares vascos hasta al menos 2015.

En la primavera de ese año se celebrarán elecciones municipales en toda España y para el otoño deberían convocarse las generales, lo que abrirá un nuevo escenario con multitud de posibilidades para llevar a cabo un relevo y, al mismo tiempo, dar salida a Basagoiti.

Rajoy estima enormemente el trabajo que Basagoiti ha realizado dentro del PP vasco, especialmente tras la crisis interna que suscitó la renuncia de María San Gil en el año 2008, y no quiere que vuelva a repetirse la historia.

Por eso, el presidente del Gobierno y líder del PP ha acordado con Basagoiti que permanezca al frente de la organización territorial en Euskadi para evitar otra ruptura y para liderar el trabajo electoral hasta los comicios locales.

En la dirección nacional creen que ahora mismo no hay nadie plenamente preparado para coger las riendas del PP vasco y consideran que las elecciones locales de dentro de dos años abrirán un nuevo abanico de posibilidades.

POSIBLES SUCESORES

Entre las principales opciones para suceder a Basagoiti destacan ahora mismo Arantza Quiroga, expresidenta del Parlamento vasco, y el presidente del PP de Guipúzcoa, Borja Semper.

En el partido resulta especialmente atractiva la posibilidad de que una mujer como Quiroga, a la que internamente se valora por el trabajo realizado la pasada legislatura al frente de la cámara regional, herede el liderazgo de Basagoiti. No obstante, algunas fuentes apuntaron a Servimedia que le vendría bien algo más de tiempo para cuajarse del todo.

La alternativa a la vía guipuzcoana está en Álava, ya que actualmente no se tienen en cuenta opciones sólidas de Vizcaya. En el PP gustan bastante el alcalde de Vitoria, Javier Maroto, y el presidente de la Diputación foral, Javier de Andrés. El futuro político de ambos dependerá en buena medida del resultado que cosechen en las municipales de 2015.

Una de las opciones que más gustan en Madrid y que practicamente nadie discutiría en el PP vasco es la de Alfonso Alonso, que fue alcalde de Vitoria durante dos legislaturas y que actualmente ostenta la Portavocía del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados.

Alonso cuenta con toda la confianza de Mariano Rajoy, quien le eligió como su portavoz parlamentario nada más llegar a La Moncloa, y mantiene una línea política muy del agrado del líder.

Sin embargo, es una persona muy cercana a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y eso podría jugar en su contra si en la elección del futuro presidente del PP vasco jugase un papel activo María Dolores de Cospedal, como en principio le corresponde a la secretaria general de los populares.