Tras explicar que el Pleno de debate de las citadas enmiendas a la totalidad se celebrará el próximo miércoles, dijo que este proyecto “carece de soluciones reales para las necesidades de vivienda de los ciudadanos de la Comunidad de Madrid, además de dañar el medio ambiente, en lugar de apostar por el bien común de la conservación de la disponibilidad del suelo todavía no agotado”.

A su juicio, este proyecto “favorece un urbanismo disperso que multiplica innecesariamente las infraestructuras, frente al modelo de ciudad compacto que recomiendan los expertos europeos en la materia, que permite agrupar servicios públicos esenciales como los suministros de agua, energía, saneamientos, comunicaciones”.

Asimismo, consideró que “promueve también un modelo insostenible de movilidad, al precisar desplazamientos familiares desde unas viviendas dispersas hasta los lugares de trabajo o colegios, con el consiguiente alto coste económico, medioambiental y social”.

“Esta ley no fomenta la revitalización de las zonas rurales y el rejuvenecimiento de los pueblos de la Comunidad de Madrid, sino todo lo contrario, porque los que viven en estas fincas de seis hectáreas suelen proceder de áreas urbanas y están desligados del entrono social de los pueblos y su vida común ciudadana”, añadió.

Por último, el diputado de UPyD destacó que esta ley establece un modelo de ocupación del territorio “propio de un afán colonizador de espacios vacíos, completamente improcedente en una Comunidad como la madrileña, densamente poblada”.