Se trata de comprensores cuyo buen estado es fundamental para garantizar la seguridad del profesional, ya que los emplean en casos de emergencia, salvamento, siniestro y extinción de incendios, así como en ambientes nocivos y tóxicos.

“Este material forma parte del equipo de protección individual que utiliza cada bombero, por lo que desde la Comunidad de Madrid tenemos claro que garantizar la seguridad de los 1.245 profesionales que luchan contra el fuego es apostar por la seguridad de todos los ciudadanos”, declaró González.

A estos medios se suman los 400 vehículos que conforman el parque móvil regional y los 18 parques.

Asimismo, el Consejo de Gobierno aprobó la contratación, para los años 2013 y 2014, del mantenimiento integral del material que compone los equipos de protección respiratoria, que incluye botellas de acero, botellas ligeras o de composite que permiten al bombero respirar en espacios nocivos o con humo, cascos con máscara, espalderas para el transporte de las botellas, máscaras, equipos de escape (que en ambientes con mucho humo proporcionan aire a las víctimas durante dos minutos), equipos cerrados de larga duración (proporcionan aire durante un periodo máximo de dos horas para rescates en túneles y minas), detectores de gases, compresores y armarios carga botellas.

Desde el pasado 15 de junio la Comunidad de Madrid tiene activado el Plan Infoma, que este año está integrado por 2.400 profesionales, entre bomberos, brigadas y retenes forestales, agentes forestales, ingenieros, técnicos y personal de apoyo y logística, 569 vehículos y nueve helicópteros, que se encuentra en máxima alerta en este periodo estival.