Más de 200 personas se habían concentrado a las puertas del pabellón para recibir con gritos y abucheos a Aznar. Desplegaron pancartas de "Nunca Mais" y "No a la guerra", y lanzaron consignas que reclamaban la "Ilegalización del Partido Popular" y emplazaban a "El del bigote, que limpie el chapapote".

La policía desplegó un amplio dispositivo de seguridad para evitar incidentes, pero no logró evitarlo del todo. Cuado apareció la fila de coches oficiales del jefe del Ejecutivo, un manifestante saltó la valla y fue parado de inmediato por los agentes, que tardaron cerca de cinco minutos en maniatarle e introducirle en el furgón. Además, otras dos personas fueron detenidas posteriormente.

Una vez comenzado el mitin, un cuarto manifestante resultó herido con una brecha en la frente durante un enfrentamiento con la policía. En el interior, continuaron las protestas contra el presidente del Gobierno. Como ya ocurrió n Málaga, Oviedo y Tenerife, una persona se levantó de su asiento durante el discurso de Aznar, pero fue callado rápidamente por los asistentes.

El máximo dirigente del PP reaccionó como viene siendo habitual. Acostumbrado ya a este tipo de situaciones, pidió serenidad a los militantes y les aconsejó que dejaran salir "tranquilo" al autor de la protesta una vez que las cámaras y los fotógrafos ya habían captado la instantánea y podría presumir en su casa de salir en televisión.

Las 6.000 personasque abarrotaron el Polideportivo As Travesas, entre ellos muchos jubilados, reaccionaron a los actos de protesta con gritos de "fuera, fuera", y aplaudieron la paciecia de Aznar, que mientras tanto aprovechaba para pasearse por el escenario, un emplazamiento circular de unos 25 metros cuadrados.

Además de Aznar, intervinieron en el acto la candidata popular a la Alcaldía de Vigo, Corina Porro; el secretario general del PP de Galicia, Jesús Palmou; y el presidente de la Xunta, Manuel Fraga. Aunque no hbló, también estuvo presente el ex consejero de la Xunta de Galicia José Cuiña.