Durante su intervención en el debate La Mesa del Empleo, organizado por el periódico 'elEconomista', Hidalgo destacó que la reforma laboral ha sido vista “adecuadamente” por el FMI, aunque incide en algunos aspectos como la necesidad de aumentar la flexibilidad laboral.

El FMI sugirió la semana pasada al Gobierno de Rajoy que aumente “ahora” el IVA y elimine la deducción en los pagos de hipotecas para quienes compran casa por primera vez.

Asimismo, el organismo presidido por Christine Lagarde aconsejó al Ejecutivo español que estudie bajar los sueldos a los funcionarios si hay desviación en el déficit, a la vez que pronosticó que no se cumplirá este objetivo. No obstante, el Fondo matizó que algunas de las reformas acometidas podrían conducir a unas perspectivas mejores a medio plazo.

Hidalgo defendió la reforma laboral que el Pleno del Senado debatirá y aprobará esta semana, porque “modifica sustancialmente el marco regulatorio introduciendo felxibilidad” y porque “favorece que el ajuste no se produzca vía despido, sino con otras fórmulas”.

Otros “importantes” aspectos de la reforma son el contrato de emprendedores, las modificaciones en el empleo a tiempo parcial y la potenciación del ‘teletrabajo'. También destacó que la reforma “fomenta toda la negociación posible, pero si no hay acuerdo, pone un mecanismo de cierre”.

Sin embargo, Hidalgo también se refirió a las “debilidades” de la nueva normativa del mercado laboral argumentando que la reforma “tiene que calar” y que sus efectos se notarán “a medio y largo plazo” por lo que algunas medidas se notarán “en cinco o siete años”.

“Estaremos permanentemente con el cubo en la mano para hacer frente a los desconchones”, añadió.

Asimismo, destacó otros puntos de la reforma laboral, como que las políticas activas de empleo pasen por “la transparencia, la concurrencia y la evaluación”, que las empresas de trabajo temporal (ETT) tengan “su hueco”, el impulso de la flexibilidad interna, mayor facilidad para la movilidad funcional, la desaparición de la categoría profesional y el fomento de la movilidad geográfica.

Por su parte, el presidente de la Federación de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, valoró aspectos de la reforma laboral como que “quita el miedo a contratar”, o que propicie que “el despido sea el último recurso”.

No obstante, el presidente de ATA también reclamó nuevas medidas que mejoren las posibilidades de capitalización del desempleo para los parados mayores de 45 años que quieran iniciar una actividad como autónomo.

De igual forma, el vicesecretario de Asuntos Económicos, Laborales e Internacionales de CEOE, Alberto Nadal, respaldó en gran medida la nueva reforma laboral porque afecta a todo el mercado laboral, incluido el "núcleo sobreprotegido", en referencia a los contratos indefinidos, y no sólo al “círculo exterior” de trabajadores.

Nadal indicó no obstante, la importancia de que las medidas del Ejecutivo también fomenten el crecimiento de la economía. El dirigente de CEOE defendió la necesidad de que el marco fiscal “nos deje respirar", para lo que reclamó una reducción de la fiscalidad sobre el empleado, así como una “reducción sustancial” de la Administración Pública.

“Se ha dado una buena mano de pintura que no tiene mala pinta, pero habrá que dejar que seque”, agregó.