Fraga llegó en medio de un tumulto de peridistas, fotógrafos y cámaras de televisión, congregados todos ellos ante la sede nacional del PP por la expectación que ha levantado la reunión.

El fundador del PP no quiso hacer comentarios sobre la situación interna que atraviesa el partido, aunque indirectamente sí lo hizo al reclamar "optimismo" tras lo ocurrido en los últimos días, con enfrentamientos directos entre el vicealcalde de Madrid Manuel Cobo y la presidenta regional Esperanza Aguirre.

El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, fue uno de los protagonistas involuntarios de los momentos previos a la reunión de la Ejecutiva del PP. A su entrada a la sede, una persona que pasaba por la calle le gritó "sinvergüenza" y le instó a marcharse "a Ferraz", la calle donde tiene su sede federal el PSOE.

Por su parte, el presidente de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, salió por la tangente cuando los periodistas le preguntaron sobre la situación interna que ha atravesado su partido en las últimas semanas, que ha provocado el cese de Ricardo Costa.

Camps se limitó a pedir un esfuerzo para superar la "crisis", pero no se refirió a la situación interna del PP sino a a "crisis económica" que tiene España y para la que, según dijo, el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero debe ofrecer soluciones.