Así se expresó Sánchez en la inauguración del XII Encuentro del Sector de las Infraestructuras, el Transporte y la Movilidad organizado por ‘ABC’ y Deloitte, donde incidió en la importancia de completar la red para ofrecer “tiempos competitivos” al ferrocarril que permitan “sacar más partido a las inversiones realizadas” frente al transporte por carretera y el transporte aéreo.

En la misma línea, señaló que en el transporte de mercancías el objetivo fijado por su departamento es lograr un incremento de la cuota del tren del 4 al 10% en el año 2030.

A este respecto, destacó la importancia que debe tener en este proceso de impulso del ferrocarril el proceso de liberalización del que destacó que genera “mucho entusiasmo” entre los operadores.

En esta línea, destacó que Adif ya ha aprobado los slots para la utilización de la red en 2022, año en que se producirá la incorporación de un tercer operador, ILSA, que ofrecerá también trenes en el corredor entre Madrid y Barcelona.

A ello, se sumará el incremento de servicios previsto por Renfe tras superar los efectos de la pandemia del Covid y la llegada de Ouigo, que actualmente solo opera en el corredor Madrid-Barcelona al corredor de Levante.

Sobre esta apuesta por el tren, señaló que “la sociedad se encuentra en un punto de inflexión” y “las cuestiones relacionadas con la movilidad deben modificarse” porque “no podemos seguir moviéndonos como hasta ahora porque el planeta no lo aguanta”.

La ministra recordó que el transporte es responsable actualmente del 27% de las emisiones de gases de efecto invernadero en España y que la carretera es el medio “más contaminante” con el 92% del total.

INVERSIÓN ESTABLE

Por otro lado, Sánchez valoró la “oportunidad” que supone para el sector de las infraestructuras la llegada de los mecanismos de recuperación y de los fondos europeos que “tienen una dimensión histórica”.

De hecho, prometió al sector que dicha situación permitirá “una inversión estable” gracias a que se llevará a cabo una planificación rigurosa, en la que tendrá importancia el aprovechamiento y la conservación de las infraestructuras, así como su digitalización para una mejor gestión de la red.

Con ello, según destacó, “se podrá abandonar la montaña rusa de la inversión de las dos décadas pasadas” ya que recordó que el Ministerio gestionará una partida de 17.000 millones de euros de los fondos europeos, de los que 7.600 millones serán inversión directa.