La organización de atención directa a la infancia provee de material escolar, libros de texto, ayuda alimentaria, ropa, calzado y artículos de higiene a los menores en situación de riesgo de exclusión. De hecho, las familias de este colectivo afrontan el curso con un alto nivel de vulnerabilidad y dificultades para pagar suministros, alquiler y cubrir necesidades.

Desde sus Centros de Día, Aldeas proporciona refuerzo escolar para reducir la brecha educativa y digital, promueve la formación y el empleo de las familias, y ofrece apoyo emocional. Además, les procura alimentos a través de ayudas económicas o mediante los comedores con los que la organización cuenta en algunos de sus centros.

La directora de los Centros de Día de Madrid, Alina Balasa, explicó que “tratamos de impulsar el desarrollo y la autonomía de los niños, niñas, adolescentes y familias en situación de vulnerabilidad mediante la formación en habilidades y el fortalecimiento de sus redes familiares y sociales”.

Los Centros de Día de Aldeas Infantiles SOS cuentan con equipos multidisciplinares formados por educadores, trabajadores sociales, psicólogos y pedagogos. También trabajan en red con la comunidad que rodea al niño o la niña, como centros educativos, de salud o terapeutas, además de la Administración y los Servicios Sociales.