Así se expresó Galán en su participación en el Foro Tendencias 2022 organizado por ‘El País’, donde mostró su malestar por llevar “tres años enterándonos de todo por los medios de comunicación”.

Además, denunció que dichas noticias se basan en “datos e informaciones no fehacientes” y admitió que “no puedo decir que es una situación agradable porque no lo es”. “No hemos tenido acceso a la información, nos hemos intentado personar sin éxito”, lamentó Galán, quien afirmó que “tengo al Consejo de Administración un poco cansado porque la mitad son extranjeros”.

“ Dijeron señores vamos a decir al señor juez que queremos ir a contárselo y contar nuestra verdad y nuestras posas porque lo que estamos viendo son datos e informaciones que no tenemos ninguna información fehaciente”, prosiguió Galán, quien pidió al juez que “investigue usted lo que quiera pero déjeme que por lo menos le cuente mi versión”.

En todo caso, aseguró que sigue “trabajando, trabajando y trabajando”, ya que, según recordó, Iberdrola tiene un plan estratégico de 75.000 millones de euros de inversión hasta el año 2025 y este año va a invertir 17.000 millones. “Detrás de esos grandes números hay decenas de miles de personas, cientos de proyectos y recursos que hay que captar en los mercados”, concluyó.

El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón ha acordado, en el marco de la pieza 17 de la llamada ‘operación Tándem’, la declaración judicial en condición de investigados de Sánchez Galán y de tres de sus directivos, Fernando Becker, Francisco Martínez Córcoles y Rafael Orbegozo, por delito continuado de cohecho activo, delito contra la intimidad y falsedad en documento mercantil.

En su auto el juez acepta la petición efectuada por la Fiscalía Anticorrupción y explica que en este momento de la investigación y con las diligencias que ya se han practicado resulta pertinente, visto los indicios expuestos, escuchar al presidente de Iberdrola y a los otros tres directivos al entender que existen indiciariamente elementos de juicio suficiente como para poder conectarles con los hechos que se investigan en esta pieza.

A lo largo de 23 páginas el juez detalla los diferentes trabajos que presuntamente Iberdrola encargó desde 2004 hasta 2017 al Grupo Cenyt dirigido por el excomisario Jose Manuel Villarejo, cuando éste se encontraba prestando servicio activo en el Cuerpo Nacional de Policía. Esos encargos se habrían hecho a través del entonces jefe de Seguridad de Iberdrola, Antonio Asenjo, y tendrían para la compañía Iberdrola la naturaleza de confidenciales.

En el caso del llamado ‘proyecto Arrow’, cuyos trabajos se englobaron entre los años 2004 y 2006, tendrían por objeto superar los obstáculos que estaban surgiendo en la construcción de una central de ciclo combinado en Arcos de la Frontera (Cádiz).

Otro de los proyectos encargados a Villarejo que incluye el auto es el denominado ‘Black Board’, desarrollado entre 2004 y 2005, y que tendría por objeto conocer la naturaleza sensible sobre actividades de Manuel Pizarro, entonces presidente de Endesa, tanto presentes como pasadas que pudieran incidir en sus actuaciones futuras.

El auto incluye otros presuntos encargos de Iberdrola a Villarejo, como el proyecto ‘Posy’ que se centraría en investigar a Florentino Pérez, presidente de ACS, a fin de conocer cualquier circunstancia que, llegado el caso, pudiera ser utilizada en un escenario de conflicto con Iberdrola.