La vicepresidenta primera del Ejecutivo, Carmen Calvo, confirmó en primer término esta reunión bilateral entre ambos líderes en una entrevista en TVE recogida por Servimedia.

"Valoramos mucho que Biden haya tranquilizado al planeta, de manera constructiva. Biden, en un discurso que pasará a la historia, dijo que la economía debe sostener la democracia. Me parece muy bueno que esté en Europa y se pueda encontrar con el presidente de España", trasladó Calvo.

La cita, según adelantó laSexta, se cerró entre los jefes de Gabinete, Iván Redondo y Ron Klain, respectivamente.

Biden accedió oficialmente a la Presidencia de EEUU el 20 de enero y no hay constancia de que haya telefoneado en ningún momento a Sánchez como sí ha ocurrido con mandatarios de otros países y en otros momentos entre España y la Administración americana con el cambio de presidente.

Sin embargo, los pasos dados para que ambos presidentes puedan verse aprovechando su presencia en Bruselas con motivo de la Cumbre de la OTAN se interpretan en La Moncloa como un síntoma de que hay "más cercanía" con la posición española, según trasladan fuentes gubernamentales a Servimedia.

Al encuentro acordado de Sánchez y Biden se suman como "gestos" la llamada del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, a la ministra de Exteriores, Arancha González Laya, cuando hasta ahora sólo había hablado por la crisis con Marruecos con su homólogo en ese país, Nasser Bourita.

En la conversación se “reafirmó”, según la Administración americana, "la fuerte alianza, amistad y relación transatlántica entre Estados Unidos y España".

A ello suman que, un día antes de esa llamada a González Laya, el pasado día 10, el portavoz del secretario de Estado de Estados Unidos, Ned Price, declaró que "existen unas diferencias muy importantes y profundas" hacia la región de Magreb respecto a las políticas de la Administración actual en comparación con las de Trump, y eso incluye, de forma general, al Sahara.

El marco de una cumbre del G20 sirvió para el primer encuentro entre José Luis Rodríguez Zapatero y Barack Obama, en abril de 2009, aunque habían hablado por teléfono en el cuarto día del mandatario EEUU al frente del poder. Por su parte, Donald Trump tardó 35 días en telefonear a Mariano Rajoy al llegar a la Casa Blanca.