Extremadura acuerda con el Estado un plan de ayudas desarrollo para las comarcas tabaqueras tras aflojar las de la UE

MADRID/MÉRIDA
SERVIMEDIA

El Consejo de Gobierno extremeño autorizó este viernes la firma de un acuerdo con el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino para llevar a cabo un programa de desarrollo rural sostenible en las comarcas tabaqueras extremeñas, actuaciones que contarán con un presupuesto de nueve millones de euros.

Cuando en 2004 se aprobó la reforma de la Organización Común de Mercados (OCM) se decidió que, tras un periodo transitorio, cesaran las subvenciones directas al cultivo del tabaco a partir de 2010.

No obstante, Extremadura, por ser una comunidad autónoma con objetivo "de Convergencia", recibirá fondos de la Unión Europea hasta 2013.

La Junta admite que este plazo hace que en las comarcas tabaqueras de Extremadura, los valles de los ríos Tiétar, Alagón y Jerte en la provincia de Cáceres, y la zona regable del río Guadiana, en la provincia de Badajoz, "se perciba con incertidumbre el futuro, no ya de este cultivo, sino de la actividad económica en general y del empleo, que en la actualidad es altamente dependiente" del cultivo del tabaco y de las actividades industriales y de servicios asociadas al mismo.

El convenio suscrito entre la Comunidad Autónoma y la Administración General pretende poner en marcha medidas para favorecer la progresiva diversificación económica y el apoyo de otros sectores que puedan contribuir eficazmente a mantener la base económica y el empleo en el territorio afectado por esta reestructuración.

Entre las actividades previstas en este programa de desarrollo rural figuran la asistencia técnica para identificar potencialidades y oportunidades de diversificación económica, así como para el diseño, dirección, seguimiento y evaluación de actuaciones.

También se prevé llevar a cabo programas de formación de los trabajadores, relacionados con las actividades económicas alternativas o emergentes, las nuevas tecnologías, las capacidades gerenciales y comerciales, la calidad, la seguridad y salud, y la integración de las consideraciones ambientales en la actividad económica.

Igualmente se contemplan inversiones en el ámbito de la transformación y comercialización de determinados productos agrarios; implementar nuevas actividades económicas en los sectores secundarios (industrias en general, sector energético, construcción) y terciarios (comunicaciones, comercial, turístico, sanitario, educación) o consolidar las ya existentes.

Se pretende además, mediante este programa de desarrollo rural, promover la innovación tecnológica o comercial para productos o servicios del territorio, incluida la aplicación de las mejoras técnicas ambientales.

(SERVIMEDIA)
07 Oct 2011
LMB