Economía

Ábalos invoca en el Congreso de UGT la “obligación” de “la izquierda” de “cortar el paso” a una ultraderecha que “solo siembra el odio, violencia y división”

MADRID
SERVIMEDIA

El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, afirmó este martes que los dirigentes de “la izquierda” están “obligados a cortarles el paso” a los de una ultraderecha que “solo siembra el odio, la violencia y división”.

Lo dijo durante el 43 Congreso Confederal de UGT donde renovará su Ejecutiva del sindicato para los próximos cuatro, con Pepe Álvarez como único candidato. “Nos une mucho más de lo que nos separa”, aseguró, convencido de que el PSOE y UGT comparten “objetivos de calado” como son “la lucha contra la precariedad y al afán por crear más y mejores puestos de trabajo, adecuadamente remunerados”.

“Las pensiones deberían ser otro terreno para el encuentro porque nos anima el mismo propósito de garantizar su poder adquisitivo y asegurar la sostenibilidad del sistema, o el reequilibrio de la negociación colectiva como parte de una rectificación profunda de los aspectos más lesivos de la reforma laboral”, agregó durante un encuentro en el que también intervinieron la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz; el presidente de CEOE, Antonio Garamendi; y el secretario general de CCOO, Unai Sordo, entre otros.

“Aspiramos a construir un país con más derechos y libertades, donde impere la justicia social”, prosiguió, alegando que es la fórmula de “verdadera modernidad” frente a la “desregulación, la ley de la selva y el sálvese el que pueda”.

Durante su intervención tuvo palabras de elogio hacia Pepe Álvarez, destacando su “capacidad de escucha y de diálogo, su pragmatismo”, y que es “muy buena persona”, además de que “le sobra capacidad negociadora” que, en estos tiempos, “es una bendita cualidad” ya que se necesita “para conseguir los grandes acuerdos que este país necesita”.

Y también tuvo reconocimientos para UGT: “Nunca he ocultado que os considero parte de nuestra familia”, deslizó, recordando que el PSOE comparte con el sindicato “no sólo un fundador, sino muchas de vuestras aspiraciones y la misma visión transformadora de la sociedad”. “Ninguno de los avances sociales que España ha protagonizado sería entendible sin la UGT”, añadió, alegando que están a la “vanguardia” en “el combate contra la pobreza y la explotación” y como “garantes” del estado de bienestar.

En este sentido refirió que “cuando el trabajo pierde la dignidad de la que necesariamente ha de revestirse, es que el sistema tiene un fallo crítico que debemos corregir con urgencia. La precariedad no es aceptable. No lo es porque, como he dicho, ataca el corazón mismo de la vertebración y la cohesión”.

Ábalos abundó en que no cabe resignación y hay que “combatir la precariedad y favorecer la estabilidad en el empleo”, como dijo que PSOE y UGT propugnan. “Estamos en disposición de acabar con la temporalidad, generalizar el contrato indefinido y devolver la causalidad a los contratos eventuales, y no me cabe duda alguna de que el diálogo social permitirá recoger esos frutos, corregir la dualidad estructural del mercado de trabajo y frenar esa perversa rotación de plantillas”, prosiguió, invocando el apoyo en esta carrera.

“SIN IGUALDAD NO HAY JUSTICIA SOCIAL”

A su juicio, “ni la UGT ni el PSOE se entenderían sin su perseverante lucha contra la desigualdad, que es la arena que históricamente gripado el motor del progreso social” por convicción y porque “sin igualdad no hay justicia social y sólo las sociedades justas tienden a la práctica real de la democracia”.

Según Ábalos, la experiencia “demuestra” que “las desigualdades se acentúan en períodos de crisis o de austeridad y que son las políticas que estimulan el crecimiento las que, con mayor intensidad, consiguen reducirlas”.

Aquí afirmó que “son las desigualdades previas y las enormes diferencias de renta las que proporcionan el caldo de cultivo de dichas crisis”, denunciando que “una sociedad que no redistribuye la riqueza y que fomenta su acumulación en pocas manos es ineficiente desde el punto de vista económico”, arremetiendo de forma expresa contra los altos sueldos de directivos.

“Es ineficiente, por ejemplo, que los ingresos medios de los ejecutivos mejor pagados multipliquen por más de 80 el gasto medio por empleados de sus empresas”, agregó, con el argumento de que es “intolerable si los ingresos se concentran en una minoría rica con menor propensión al gasto” porque se “cercenan las posibilidades de consumo de la mayoría” además con un resultado “inevitable” de menor crecimiento.

“Hasta los neoliberales más recalcitrantes tendrían que asumir las ventajas prácticas de una sociedad más igualitaria”, apostilló, para reivindicar el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia aprobado por el Gobierno y solicitar su respaldo frente al “austericidio” que impuso la crisis del 2008 y cuyas recetas supuso el “sufrimiento de muchas familias”.

“No respondían a ninguna lógica económica, no se aplicó la racionalidad, sino una ideología reaccionaria. Por eso se bajaron los salarios y se abaratar los despidos, se redujeron las pensiones y se cambiaron las reglas de la negociación colectiva. Se aprovechó la situación para recortar los derechos que tanto sacrificio costó conquistar”, concluyó.

(SERVIMEDIA)
18 Mayo 2021
ECR/clc