Su advertencia la realiza la directora general del Trabajo, Verónica Martínez, en una carta dirigida a la responsable sindical en el banco de CCOO a la que ha tenido acceso Servimedia y donde expone que el departamento de Trabajo recibió la comunicación del despido colectivo del BBVA el pasado 6 de mayo e inquiere al banco a actuar conforme a ley.

En la carta insta al banco de manera expresa también a abordar medidas que permitan “atenuar sus consecuencias -del ERE- respecto de las personas afectadas, mediante el recurso a medidas sociales de acompañamiento” en la propia fase de consultas.

Según detalla, la ley obliga a la autoridad laboral a “velar por la efectividad del periodo de consultas”, regulado por normativa y con este requerimiento recuerda “a la mercantil” -el banco- “que deben cumplirse todos y cada uno de los enumerados en la norma reglamentaria, y en particular los recogidos en los apartados 2 a 5 del artículo 7 del Reglamento aprobado por el Real Decreto 1483/2012, de 29 de octubre”.

Al renglón seguido subraya que esta obligación es particularmente relevante en la situación actual dado la envergadura del ajuste previsto: “Adquieren -relata la responsable de Trabajo en su repuesta- especial trascendencia en los supuestos como el presente, no obstante, los requisitos de fondo, dado que la intención empresarial comunicada presenta elementos de especial gravedad y trascendencia, tanto por el impacto que la intención empresarial comunicada tiene sobre el empleo, como, en particular, por sus efectos sobre las personas trabajadoras, sobre las que eventualmente resulten afectadas por el despido comunicado y también sobre aquellas que no lo sean”.

Finalmente, concluye la Dirección General de Trabajo que, “siempre desde el respeto a la autonomía negocial de las partes”, con este requerimiento “hace advertencia expresa de la obligatoriedad de que en el periodo de consultas se deben debatir aquellas medidas dirigidas a evitar o reducir los despidos colectivos”. Además, agrega que deben ir dirigidas a “atenuar sus consecuencias respecto de las personas afectadas, mediante el recurso a medidas sociales de acompañamiento, de acuerdo con lo mandatado por el artículo 7.1 del reiterado”.

En las últimas reuniones, la dirección de BBVA ha planteado a los sindicatos salidas de trabajadores vía prejubilaciones a partir de 56 años y con el 60% del sueldo, y de edades inferiores con compensaciones de 27 días por año trabajado con un máximo de 18 mensualidades.

Las condiciones económicas compartidas con los sindicatos prevén que sean por adscripción voluntaria al ERE planteado para 3.798 personas. Si no se cubre el cupo, el banco ha indicado que procederá al despido de personas con menor valoración media de desempeño en los años 2019 y 2020, según indicaron fuentes sindicales.

En concreto, el banco plantea que los empleados con 56 y 57 años y con una antigüedad mínima de 15 años salgan de la plantilla con ingresos equivalentes al 60% de la renta temporal del Nivel Retributivo Anual (hasta los 63 años) descontando la prestación por desempleo.

Si su edad se sitúa entre los 58 y 62 años y tienen también una antigüedad mínima de 15 años en el banco, les ofrece un 65% de la misma renta temporal, descontando asimismo la prestación por desempleo. En ambos casos se hará cargo, además, del abono del convenio especial a la Seguridad Social hasta los 61 y 63 años, respectivamente.

Para los empleados mayores de 63 años que se adhieran el plan contempla compensaciones de 20 días por año trabajado y con máximo 12 meses. Para el resto de trabajadores que salgan y no reúnan esas condiciones por edad o antigüedad en la plantilla propone indemnizaciones de 27 días por año trabajado, hasta un máximo de 18 mensualidades.