Así lo indicó durante su intervención en el ‘Acto por la Concordia’, celebrado en la madrileña plaza de Chamberí, después de que interviniesen sus compañeros Jordi Cañas y Maite Pagazaurtundua, que contaros sus experiencias de violencia en Cataluña y País Vasco, respectivamente.

Bal remarcó que en Madrid “no vamos a sucumbir al odio”, y prometió trabajar para evitar que eso pase en la Comunidad de Madrid, porque “pensamos que la convivencia se puede ir al garete”.

“Nos jugamos nuestra libertad, la de nuestra familia, la de nuestros amigos y, al jugarnos la libertad nos jugamos el futuro”, apuntó. En este sentido, incidió en que “no nos van a conseguir separar con una agenda de enfrentamientos”, porque “la línea roja de Ciudadanos es caer en la división”.

En este punto, lamentó que Pablo Iglesias se levantase de un debate porque Rocío Monasterio no condenó una agresión y “hoy se descubre que dos de sus escoltas estaban involucrados" en altercados en un mitin de Vox "y él no niega la violencia”. Por ello, para esas formaciones, “hay violencia condenable y otra disculpable, mientras que nosotros condenamos toda la violencia”.

Por ello, el candidato de Ciudadanos remarcó que no van a permitir que eso ocurra en Madrid “de ninguna manera, de ningún modo”. De este modo, aseguró: "No vamos a defender eso que traerán Gabilondo e Iglesias ni vamos a permitir tampoco la agenda del retroceso que defiende Vox”.