En la reunión de mañana volverán a participar el secretario general de Vivienda y Agenda Urbana, David Lucas, y la todavía secretaria de Estado de Agenda 2030 y futura ministra, Ione Belarra, los máximos responsables de la negociación por cada una de las partes.

La ley sigue encallada por la negativa del PSOE a incluir la limitación de los precios del alquiler y la de la formación liderada por Pablo Iglesias de aceptar como alternativa los incentivos fiscales propuestos por el departamento dirigido por José Luis Ábalos.

De hecho, aunque ha habido reuniones técnicas, Lucas y Belarra no se han visto las caras desde el pasado 17 de marzo, día en que el PSOE presentó su propuesta de incentivos fiscales, que permite una reducción de hasta el 90% en el IRPF si se rebaja un 10% el precio del alquiler en las zonas tensionadas.

La propuesta elevada por el equipo de José Luis Ábalos contenía un nuevo mecanismo de contención y bajada de precios, a través de la mejora del marco fiscal, la declaración de zonas de mercado residencial tensionado y la definición de vivienda vacía en la regulación del recargo existente en el Impuesto sobre Bienes Inmuebles.

La propuesta, según fuentes ministeriales, planteaba estimular la oferta, partiendo de la consideración de que en España la propiedad de la vivienda en alquiler corresponde muy mayoritariamente a pequeños propietarios, en su mayor parte particulares, para los que el alquiler de vivienda no es una actividad económica principal.

Sin embargo, Unidas Podemos rechaza esta propuesta al entender que está “basada únicamente en incentivos fiscales para propietarios” y porque “no incluye la regulación del alquiler, incumpliendo flagrantemente el acuerdo de Gobierno”.