La responsable de expresar el malestar del Ejecutivo al encargado de negocios de la Embajada de Venezuela en España fue la secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y para Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach, según informaron fuentes diplomáticas.

En su conversación con Mauricio Rodríguez Gelferstein, Gallach expresó la "decepción" del Gobierno por la expulsión de la delegada de la UE en Caracas y destacó que "actuaciones como esa o como las declaraciones de Nicolás Maduro no favorecen que pueda concretarse el interés de España y de la Unión Europea de ser actores constructivos en la salida de la crisis".

Esta situación se produce después de que Nicolás Maduro ordenara el sábado "revisar a fondo" las relaciones que su país mantiene con España tras la visita que González Laya realizó a la frontera entre Colombia y Venezuela. "Basta de hipocresía, se lo advertimos. El que quiera buenos tratos tiene que dar respeto y buen trato a Venezuela. Procedamos a revisar a fondo todas las relaciones con España, a todo nivel", exclamó el presidente venezolano.

Estas declaraciones fueron replicadas por la propia González Laya, quien trasladó a Maduro que "yo he visitado Colombia, he visitado una serie de proyectos financiados por la cooperación española y lo he hecho dentro del respeto a este país y a todos sus vecinos, y el mismo respeto que yo predico es el mismo respeto que yo exijo, ni más ni menos".