El precio final de siete de estos lotes ha superado en más de un 31,33% el importe mínimo por el que se podían adjudicar. Gracias al dinero obtenido con la subasta, se sufragarán actuaciones de prevención, investigación, persecución y represión de los delitos de narcotráfico y blanqueo de capitales y cooperación internacional en la materia.

En los lotes subastados había viviendas, locales comerciales, plazas de garaje y trasteros, así como fincas rústicas, parcelas urbanas y una nave industrial. Estaban en las provincias de Madrid (1), Pontevedra (4), Barcelona (1), Huelva (1), Santa Cruz de Tenerife (1) e Islas Baleares (1) y todos estos inmuebles estaban relacionados con el narcotráfico.

El dinero recaudado por el Fondo de Bienes Decomisados se destina a revertir en la sociedad los daños ocasionados por las drogodependencias y el narcotráfico. Así es como se financian los programas de prevención de toxicomanías, asistencia de drogodependientes e inserción social y laboral.

En los últimos años, aproximadamente el 70% de estos ingresos se ha dedicado a este tipo de programas de reducción del consumo de drogas, y el 30% a la persecución del narcotráfico y actuaciones policiales y aduaneras.

La gestión para la enajenación de los inmuebles, incluida la celebración material de la subasta, la ha llevado a cabo, como en otras ocasiones, la Sociedad Mercantil Estatal de Gestión Inmobiliaria de Patrimonio (Segipsa), dependiente del Ministerio de Hacienda.