Delincuencia

Cae una banda que introducía armas de Europa del este para vendérselas a delincuentes

MADRID
SERVIMEDIA

La Guardia Civil ha desarticulado una banda que introducía en España armas de la Europa del este que eran adquiridas en su mayoría por personas con antecedentes penales y dedicadas a la delincuencia común.

Según informó este viernes el Instituto Armado, en el marco de la ‘operación Treta’ han sido detenidas nueve personas y se ha declarado como investigadas a otras seis más por la presunta comisión de los delitos de tráfico de armas, tenencia de armas prohibidas, depósito de municiones, falsedad en documento público, usurpación de funciones y contra la salud pública.

En el marco de la operación se han realizado entradas y registros en las provincias de Alicante, Guipúzcoa, Madrid, Ciudad Real, Barcelona, Granada, Zaragoza y Murcia.

Se han intervenido 36 armas de fuego, 9.928 cartuchos metálicos de diferentes calibres, 20.195 euros y una plantación de marihuana (161 plantas), entre otros efectos. También ha sido desmantelado en la provincia de Alicante un taller clandestino para la manipulación de armas ubicado.

CONVERSIÓN DE LAS ARMAS

La operación se inició a mediados del pasado año, cuando se detectó que un individuo de nacionalidad rumana, residente en la provincia de Alicante, podría estar traficando con armas, las cuales adquiría en extranjero y posteriormente vendía en España a través de Internet y de aplicaciones de mensajería instantánea encriptada.

La investigación reveló que este individuo venía dedicándose a esta actividad ilegal desde hacía varios años, encontrándose investigado por hechos similares en su país. Las pesquisas permitieron descubrir la existencia de una estructura criminal organizada que introducía en España armas detonadoras fácilmente convertibles en armas de fuego reales.

Las armas eran adquiridas en países del Este de Europa para posteriormente manipularlas en un taller clandestino ubicado en la provincia de Alicante, donde las modificaban para hacerlas aptas para disparar munición con proyectil y hacer fuego real, siendo finalmente distribuidas a compradores por todo el territorio nacional.

Muchos de estos compradores del armamento pertenecían al entorno de la delincuencia común, con antecedentes por hechos delictivos violentos, por lo que con la intervención de dichas armas se ha podido evitar la comisión de otros delitos violentos.

(SERVIMEDIA)
04 Dic 2020
NBC/gja