Campo se refirió a esta cuestión en el Pleno del Senado, donde la portavoz de Ciudadanos, Lorena Roldán, le preguntó sobre esta orden contra la desinformación que para la formación naranja, PP y Vox busca implantar una especie de ‘ministerio de la verdad’.

El ministro afirmó que si se lee la orden del BOE “con la benevolencia” con la que deben abordarse “este tipo de propuestas”, se verá que la misma no busca la censura ni intervenir medios. Sostuvo que el objetivo es combatir la desinformación “que ponga en peligro el interés nacional” y que “generalmente” tiene que ver con iniciativas “nacidas en el extranjero”.

Destacó al respecto que con la orden del 30 de octubre el secretario de Estado de Comunicación, Miguel Ángel Oliver, no se va a dedicar a controlar los medios informativos españoles. Afirmó, que la función de este alto cargo de La Moncloa “no es decir lo que es o no es verdad, no es cerrar páginas web, no es quitar licencias de radiodifusión, no es meter en la cárcel a los periodistas”.

“DAR PUBLICIDAD”

El ministro añadió que la orden sobre la desinformación sólo buscaba “dar publicidad” al procedimiento aprobado al respecto por el Consejo de Seguridad Nacional. Añadió que debe entenderse como “una pieza más en el engranaje de protección de dos derechos fundamentales clave, que son la libertad de expresión y el derecho a una información veraz”.

Roldán rechazó las explicaciones del titular de Justicia y afirmó que los españoles no necesitan “ningún ministerio de la verdad” y que el propio Gobierno quedaría en muy mal lugar si se le somete a un escrutinio sobre desinformación.

La senadora de Ciudadanos afirmó que es “amplia” la lista de situaciones en la que el Ejecutivo puede ser acusado de desinformación, como en todo lo relativo al IVA de las mascarillas o cuando el presidente Pedro Sánchez dijo en campaña que no iba a pactar con Podemos y después acabó formando un Gabinete de coalición con este partido.