Desde la tribuna del Congreso de los Diputados en el debate de las enmiendas de totalidad al proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado, Arrimadas respondió al portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, tachando irónicamente su discurso de "desproporcionado", dedicado sobre todo a Ciudadanos para decirles que no han conseguido nada y que su argumentario es "fake".

"Lo entiendo, no tiene que ser plato de buen gusto darse cuenta de que no lo han visto venir", le dijo, antes de desgranar las "líneas naranjas" contenidas en el proyecto de ley, por las que Ciudadanos no ha presentado enmienda a la totalidad. Unidas Podemos, dijo, quería gravar con el 21% de IVA la educación concertada y especial, y la sanidad privada, y también incremetar el Impuesto de Sociedades, y ninguna de esas pretensiones se ha incluido, gracias a Ciudadanos.

Ahora, prosiguió, están sobre la mesa las exigencias de Ciudadanos para poder plantear un voto favorable al proyecto. "Entiendo la dificultad del momento", aseguró Arrimadas, y por eso no va a pedir "imposibles" al Gobierno, sino moderación, sentido común, y "no ceder a chantajes". Esas exigencias pasan por ayudas directas a pymes y autónomos, medidas de conciliación, y reformas que garanticen la sostenibilidad de los Presupuestos en los años siguientes.

La condición de suprimir la enmienda sobre el castellano en la Ley de Educación, aseguró, no la pone Ciudadanos, sino que la han puesto "sus socios" como condición para apoyar los Presupuestos, y eso es la prueba de que el Gobierno "tiene que elegir entre dos vías".

"No podemos sacar a Podemos del Gobierno, pero sí hemos podido sacar unas cuantas propuestas de Podemos de los Presupuestos", dijo Arrimadas, y es la hora de que el Ejecutivo elija entre la moderación de Ciudadanos y las "radicalidades" de unos y las "cacicadas" de otros. Dejó claro, en ese sentido, que on le importa "coincidir" con otras formaciones en una votación, como lo harán el PP y la CUP en las enmiendas de totalidad, pero "para ser socios de Presupuestos les llega la hora de la verdad y van a tener que elegir".

La mano de Ciudadanos estará tendida "hasta el último minuto", aseguró, pero si el Gobierno decide optar por los independentistas "jamás podrán decir que no tenían opción" porque la oposición se comportó de forma "irresponsable".