Ciencia

Publican el primer estudio evolutivo sobre las ‘margaritas gigantes de Darwin’ y su diversificación en las Islas Galápagos

MADRID
SERVIMEDIA

Un equipo internacional de científicos acaba de publicar un estudio pionero sobre todas las especies del género Scalesia, también conocidas como ‘las margaritas gigantes de Darwin’ para investigar las relaciones entre las especies, su ritmo de diversificación y sus principales patrones evolutivos.

El estudio, que ha contado con la colaboración de varios investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Real Jardín Botánico (RJB) de Madrid, además de científicos de Ecuador y Estados Unidos, aporta documentación sobre una de las más emblemáticas radiaciones evolutivas en unas islas geológica y ambientalmente muy dinámicas como son las Galápagos.

Los resultados de esta investigación, publicada en la revista ‘Current Biology’, señalan que el linaje de Scalesia se separó de sus parientes más próximos del continente (Sudamérica) hace unos tres millones de años. Sin embargo, las 15 especies actuales de Scalesia, todas ellas exclusivas de las Islas Galápagos, se habrían diversificado a partir de un antepasado común, probablemente, en el último millón de años.

Otro patrón evolutivo identificado en Scalesia es el incumplimiento de la hipótesis conocida como la ‘regla de la progresión’, según la cual se espera que las especies más antiguas ocupen islas más antiguas. En este caso, como apuntan desde el RJB-Csic, la regla se incumple porque el género se ha diversificado muy recientemente, cuando la mayoría de las islas ya habían emergido del fondo marino.

El investigador del RJB, Mario Fernández-Mazuecos, señala que en el estudio encontraron que “las especies han diversificado en su mayor parte dentro de las islas más grandes del archipiélago, y no tanto como resultado del aislamiento entre islas”.

Asimismo, durante el estudio, también descubrieron que las especies de ‘margaritas de Darwin’ similares en sus caracteres tienden a no estar estrechamente emparentadas. “Esto sería el resultado de la evolución convergente, es decir, esos caracteres similares pueden haber evolucionado varias veces como adaptación a ambientes similares en distintas islas”, añade el investigador del RJB-Csic.

(SERVIMEDIA)
05 Oct 2020
IAR/gja