Cae en Madrid una banda que robaba coches para defraudar a compañías aseguradoras

MADRID
SERVIMEDIA

La Policía Nacional han desarticulado en Talamanca del Jarama (Madrid) una organización delictiva que estafaba a compañías aseguradoras, ante las que daban parte de incidentes con vehículos que previamente robaban y que llevaban documentación de turismos siniestrados.

Según informó este jueves la Policía, una vez que disponían los vehículos robados con documentación de otros siniestrados denunciaban la sustracción o incendio de los mismos a las aseguradoras. Por este procedimiento la banda llegó a recibir 15.000 euros por un coche que dijeron había sido robado a la fuerza o 35.000 por otro que aseguraron fue sustraído en la calle.

Como miembros de esta banda han sido detenidas cinco personas, a las que se acusa de los delitos de pertenencia a grupo criminal, robo con fuerza, estafa, receptación y simulación de delito. Con la desarticulación de este grupo se han esclarecido ocho hechos delictivos relacionados con el robo de coches o el cobro irregular de seguros.

Las primeras pesquisas se iniciaron cuando la Policía tuvo conocimiento de las presuntas actividades ilícitas de un empresario de la zona del Jarama (Madrid), que al parecer estaba utilizando como tapadera algunos negocios que regentaba para dedicarse a la compra de vehículos siniestrados. Con la documentación de estos coches daba cobertura legal a otros, que habían sido robados por grupos delincuenciales dedicados a ello.

Con esta información, los investigadores lograron identificar a varias personas que integraban un grupo delictivo asentado en la localidad madrileña de Talamanca del Jarama y en localidades próximas, como El Casar y Daganzo. Todas estos sospechosos habían sido titulares de numerosos vehículos que se transferían entre ellos y entre las empresas sobre las que tenían control. Además, todos ellos tenían un denominador común y es que habían denunciado diferentes robos por los que habían recibido importantes indemnizaciones de compañías aseguradoras.

Tras varias gestiones, los policías detectaron su 'modus operandi', que consistía en comprar turismos siniestrados a través de desguaces o de particulares para adquirir las documentaciones originales de los mismos. Una vez que tenían en su poder esta documentación, conseguían vehículos robados de las mismas marcas y modelos para darles cobertura legal. Finalmente denunciaban el robo o incendio de los turismos a las compañías aseguradoras.

(SERVIMEDIA)
18 Jun 2020
NBC/gja