Su iniciativa busca ayudarles cuando sufren una reducción de su actividad habitual por el estado de alarma y favorecer su posterior recuperación cuando se supere la crisis, según informó este jueves la aseguradora.

La puesta en marcha se enmarca dentro de un abanico de medidas dirigidas a sus prestadores sanitarios, entre las que también figuran la agilización de los plazos de liquidación de las prestaciones realizadas o la concesión de anticipos adaptados a las necesidades particulares de cada uno.

Dichas facilidades las realizarán con cargo a la actividad asistencial futura que realicen para la compañía en los 18 meses siguientes a la finalización del estado de alarma, y el fondo ahora dotado servirá para financiar este tipo de acciones.

Adeslas está facilitando además la asistencia sanitaria que demandan los asegurados afectados por el coronavirus a través del cuadro médico concertado, ha desplegado plataformas de atención a los pacientes que están confinados en sus domicilios y ha habilitado la consulta por teléfono y la videoconsulta, evitando desplazamientos y riesgos de contagio tanto para profesionales como para asegurados.

Los 27 centros médicos Adeslas permanecen, no obstante, abiertos al servicio de los pacientes, de acuerdo con las directrices marcadas por las consejerías de sanidad de cada Comunidad Autónoma e, incluso, mantiene operativas 50 clínicas dentales para urgencias.