Las cámaras de comercio señalan en un comunicado que la situación es “preocupante”, “pero con la adopción de medidas puede mitigarse el efecto sobre la actividad de las empresas y sobre los propios turistas”.

La entidad que preside José Luis Bonet pide que se dote temporalmente de mayor flexibilidad a las empresas en los ámbitos fiscal y laboral; que se promuevan líneas de financiación ágiles y favorables que permitan a las empresas hacer frente a las tensiones de caja que están experimentando, particularmente las pymes y que se dé información rigurosa, veraz y contrastada para evitar sobrerreacción por parte de turistas nacionales e internacionales.

La Cámara también pide al Ejecutivo una campaña específica de promoción que refuerce la imagen de España como destino turístico seguro y con un sistema de salud eficaz, además de que se elabore un plan de actuación adicional en el ámbito de la promoción para su puesta en marcha tan pronto como se produzcan los primeros signos de recuperación.

El plan, a juicio de las cámaras, deberá prestar especial atención al turismo de largo radio dada su correlación con el crecimiento del gasto turístico en España.

Al tiempo que pide una batería de medidas de apoyo, la Cámara de Comercio rechaza cualquier actuación que pueda penalizar o influir negativamente en la actividad de las empresas en este momento, particularmente la creación de nuevos impuestos o tasas u otras medidas que afecten al turismo y al comercio.