El jefe del CICR en Somalia, Pascal Mauchle, afirmó que este país se encuentra "cada vez peor" debido a la guerra civil de los últimos 20 años.

"Decenas de miles de personas han huido de Mogadiscio en los últimos meses. La producción de alimentos ha disminuido, los precios se han disparado y mucha gente no puede permitirse el lujo de comprar alimentos y otros productos esenciales, incluso cuando están disponibles en el mercado", apuntó.

Mauchle señaló que "la situación económica sigue deteriorándose y la gente lucha por su supervivencia diaria, no sólo en las zonas afectadas por el conflicto, sino también en las principales ciudades en el norte del país".

Durante las últimas semanas, el CICR y la Media Luna Roja Somalí han distribuido raciones de dos meses de arroz, frijoles y aceite a unas 240.000 personas desplazadas y colectivos vulnerables, y mantas, utensilios de cocina y cubiertas de plástico a más de 300.000 personas.

Ambas organizaciones han dado prioridad en estas tareas a las personas con discapacidad, los huérfanos y las familias encabezadas por mujeres.

La ayuda llegó a muchas ciudades diferentes en el Bajo Shabelle, Gedo, Bay y Bakool (sur de Somalia); Hiraan y Mudug (centro), y Puntlandia (norte).