Así lo indicó el ministro durante su intervención en una jornada sobre infraestructuras y movilidad organizada por el periódico 'Expansión'.

Mañana, jueves, concluye el plazo para que se postulen las empresas que quieran participar en el proceso de liberalización ferroviaria y competir con Renfe, y el ministro se mostró seguro de que “va a haber” demanda, dado que “tenemos una infraestructura muy interesante”.

Ábalos señaló que este proceso contribuirá a incrementar la productividad y a generar empleo y actividad económica. Precisó que los nuevos trenes que lleguen requerirán servicios de mantenimiento que “deberán realizarse en España”.

“No ha sido un proceso fácil”, admitió el ministro, quien acto seguido añadió que “tenemos grandes expectativas” y “creemos en la liberalización”. Apuntó que Adif “sacará más partido de los más de 50.000 millones de euros invertidos” en la alta velocidad, y Renfe “podrá demostrar todo su potencial para competir”.

Por otra parte, el ministro apostó por un pacto de Estado por las infraestructuras “sobre principios, criterios y metodologías, y no tanto sobre infraestructuras concretas” al argumentar que realizar el mismo esfuerzo inversor que se hacía antes no aumenta la productividad de la economía ni mejora oportunidades para los ciudadanos. Consideró que “las demandas de nuevas infraestructuras son en España muy altas y siguen creciendo” y apuntó en esta línea que “los partidos no podemos usar las administraciones que gobernamos para sacar ventajas coyunturales”. Por ello, incidió en que este pacto de Estado “debería evitar esto”.

En esta línea, dijo que el Ejecutivo ha encargado a la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (Airef), junto con la OCDE y la Comisión Europea, un estudio que analice las fortalezas y debilidades en el proceso inversor y formule recomendaciones.

Ábalos precisó que si se incluyen todas las actuaciones de obra nueva en carreteras del Estado pendientes de ejecutarse que se asumieron con la llegada del PSOE al Gobierno, la cifra asciende a unos 34.000 millones de euros, sin incluir el gasto en mantenimiento y conservación de la red. En Adif, el montante pendiente de ejecutar es de 12.000 millones y en Adif Alta Velocidad es de 21.000 millones.

En cuanto a la movilidad, Ábalos avanzó que el 18 y 19 de noviembre España acogerá una reunión de alto nivel sobre conducción conectada y automatizada, que contará con la asistencia de ministros europeos de transporte, entre otros participantes, y que Fomento y la DGT están preparando conjuntamente.

Precisó que en ese encuentro se hablará de definir un marco legal y técnico europeo que facilite la introducción de vehículos conectados y automatizados. “En el nuevo contexto digital no podemos pensar en la inversión en infraestructuras como veníamos haciendo en el pasado”, subrayó.