Inchausti se pronunció así durante un desayuno informativo organizado por Executive Forum donde admitió que “todos prevemos que la actividad económica se está ralentizando” por el comportamiento de algunos indicadores y los múltiples focos de incertidumbres internacionales.

“Nosotros estamos sufriendo y el resto también”, reconoció en alusión al comportamiento del seguro en ramos como el del automóvil, donde la caída de las ventas ronda el 10%.

A su entender “probablemente no se den todas las circunstancias catastróficas que se dieron en la anterior crisis”, aunque la previsión sea a la baja, pero sí alertó sobre el margen de maniobra para capearla, sobre todo, por la “alta” deuda pública emitida.

“La deuda está en niveles récords (…) La política monetaria tiene su recorrido agotado y la política fiscal está muy restringida”, avisó. “Es verdad que no tiene tan mala pinta –como la anterior crisis-, pero también que el grado de preparación y margen de maniobra no es muy elevado”, agregó.

Sin embargo, quiso matizar cuál podría ser el potencial impacto de un peor desempeño económico en las empresas, atribuyendo cualquier evolución a la acertada o desafortunada administración de las mismas. “Una gestión en un marco económico adverso puede tener un buen desempeño. Siempre hay margen para que, haciendo una buena gestión, las cosas salgan bien”, precisó.

Al ser cuestionado de forma específica por el bloqueo político, lamentó el retraso que eso está provocando en la transposición de directivas que son claves para la industrial del seguro.

Según Inchausti, el 'impass' político “sí impacta” porque se ha retrasado, por ejemplo, la trasposición de la directiva comunitaria sobre distribución y planes de pensiones pese al deseo del ministerio de Economía de agilizarla, incluso, juntando ambas en una normativa.

La razón que indicó es que el Gobierno tropezó con un “stock de directivas paradas” y, como eso “supone multas”, el “driver parece que ha sido evitar sanciones” a la hora de priorizar las normas.

Para el vicepresidente de Mapfre, esto “no es bueno” porque vamos a ser "uno de los últimos países de Europa que genere una regulación al respecto y hay puntos que son relevantes”. En este sentido estimó que “convendría que se regulara lo antes posible en un sentido u otro para no generar incertidumbre”.