Industria estima que las flotas de vehículos urbanos son un “nicho ideal para comenzar a trabajar con estos vehículos”, y se mostró esperanzado en que “en dos o tres años estas flotas podrían incorporar nos 10.000 vehículos al año”. “En este segmento vamos a hacer los esfuerzos”, subrayó.

Sebastián hizo estas consideraciones durante su participación en el Fórum IBM “El vehículo eléctrico: un nuevo modelo de eficiencia energética”, que se celebró este jueves en Madrid y donde se ha debatido sobre las oportunidades y retos que plantea hoy la utilización de los vehículos eléctricos en los entornos urbanos.

El ministro incidió, dentro de los planes previstos en la Estrategia Integral del Vehículo Eléctrico, presentada el pasado 6 de abril por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero, en la oportunidad que supone incorporar a los municipios de más de 50.000 habitantes “a este reto por sus ventajas medioambientales”.

Precisamente, para impulsar la incorporación de estos municipios, el IDEA, anunció, presentará en breve una guía explicando las ventajas urbanas de usar en ciudad el vehículo eléctrico. “Con el tiempo”, confió, “habrá más zonas de aparcamiento gratuito y facilidades de recarga”, y agregó: “También elaboramos un plan de marketing, dotado de un millón de euros, porque”, advirtió, “el proyecto será ser un éxito solo si lo quieren los ciudadanos”.

“El compromiso de las ciudades es claro para el éxito de este proyecto en un futuro más o menos temprano”, reiteró el ministro, quien agregó que, a pesar de la crisis económica, “tenemos oportunidades, por el lado de la demanda y de la oferta”.

El vehículo eléctrico, destacó, tiene “muchas facetas: energética, industrial, de apoyo a las energías renovables, de I+D+i , de gestión de la Red y de aplicación de las TIC”.

Por esta razón, recordó, en mayo Industria creó un grupo de seguimiento para hacer un programa coordinado de avance, que abarca el periodo 2010-2012, “cuyo hito destacado, en el marco del pronunciado ajuste fiscal, es una partida de 80 millones de euros para impulsar la demanda de estos vehículos y subvencionar hasta el 20% del coste de adquisición con un máximo de 6.000 euros por vehículo para particulares”, en lo que Sebastián afirmó que es “una clara demostración del Gobierno español a favor” de esta iniciativa, “pese a la dificultades presupuestarias”.

Otras acciones en cartera previstas por Industria son la necesidad de desarrollar estándares normativos, reglamentos “que creen un entorno para el vehículo (fabricación de componentes o recarga eléctrica)”, ámbito en el que ya trabaja Aenor, “para que no se repita la pesadilla de los teléfonos móviles, con cargadores distintos, por ejemplo”, lo que, apuntó, está previsto finalizar en marzo de 2011: “Una tarea silenciosa pero fundamental, que esperemos se aplique en 2012”.

LA APUESTA SOSTENIBLE

IBM ha puesto en marcha diversas iniciativas que buscan dinamizar y divulgar este modelo de negocio sostenible. En esta línea, la sede corporativa de IBM acoge desde este año el primer punto de recarga para vehículos eléctricos -instalado por Endesa- ubicado en una empresa privada en España.

La aportación de IBM en el desarrollo del modelo de transporte sostenible en España se nutre de los conocimientos derivados de la I+D, así como sus activos tecnológicos en áreas específicas y soluciones de integración de infraestructura tecnológica para la gestión de dicho modelo.

En concreto, IBM participa en varias iniciativas de investigación, con el propósito de avanzar en el desarrollo de tecnologías más inteligentes que estimulen la adopción y uso del vehículo eléctrico. Tal es el caso del Proyecto Battery 500, una iniciativa puesta en marcha desde el Laboratorio de Investigación de IBM en Almaden (California), cuyo objetivo es incrementar la autonomía de los vehículos eléctricos hasta los 750 kilómetros.

Asimismo, la compañía trabaja en el despliegue e implantación de redes eléctricas inteligentes, que facilitan la infraestructura para la recarga del coche eléctrico. Un ejemplo de ello es el Proyecto Edison, desarrollado en la isla danesa de Bornholm y en el que colabora junto con otras entidades, con el fin de desarrollar una infraestructura inteligente que permita hacer más eficientes las recargas de los vehículos eléctricos, aprovechando la energía eólica.