Desde el entorno del líder del PP ven estos debates “más informativos” que decisivos y los insertan en “la normalidad” de confrontar ideas y proyectos entre dirigentes políticos. Piensan, además, que un debate ‘a cuatro’ no es “tan definitorio” como un ‘cara a cara’ porque entre tantos participantes el mensaje se diluye.

Las citadas fuentes estiman que un debate a cuatro bandas “es difícil ganarlo o perderlo”, pero en todo caso supone una oportunidad para exponer públicamente y en horario de máxima audiencia el proyecto con el que cada cual se presenta a las elecciones generales. Reconocen, no obstante, que el margen para parecer moderado o duro es “muy estrecho”.

En el equipo de Casado inciden en que los debates “no son de laboratorio” y el espectador percibirá el tono “impostado” de quienes vayan con un discurso enlatado. En todo caso, en la cúpula del PP aseguran que Casado “no tiene nada que perder” y sí que ganar en estos debates, al igual que Iglesias y Rivera.

Opinan que Sánchez es el que más tiene que perder en el debate de este lunes en RTVE, al igual que en el de Atresmedia del martes, porque le ha alterado una “plácida” campaña en la evitaba riesgos y cuidaba sus exposiciones. En el PP tampoco ven “creíble” que Sánchez encare estas jornadas en ‘modo zen’ sin Vox en los platós, como era su apuesta inicial.

En el PP se guardan el detalle de la estrategia para no dar pistas a sus adversarios, centrados todo el Domingo de Resurrección en la preparación de los debates. Casado, en cambio, ha mantenido su agenda de fin de semana y su equipo de campaña comenzó a diseñar el plan a seguir este domingo por la tarde en la sede nacional del PP.

Sus asesores adelantan que Casado no perderá minutos atacando a Rivera, con quien está llamado a entenderse si da la suma tras el 28-A, y focalizará sus esfuerzos en batir al “adversario” común que encarna Sánchez y alertar de sus posibles pactos a futuro con quienes ansían la ruptura de España.

Dichas fuentes aseguran que Casado acudirá con “mucha tranquilidad” a estas citas porque lleva “toda la vida debatiendo” y es “el único” que desde la precampaña ha estado haciendo propuestas que “van calando” en el electorado. Tampoco dan rédito los sondeos electorales por la “remontada” que aprecian en la encuesta “real” de la calle.

En la cúpula del PP confían en la suma con Cs y Vox para llegar al Gobierno e incluso hablan de no dar por supuesto el triunfo del PSOE cuando sigue habiendo un 40% de indecisos que a la hora de enfrentarse a las urnas suelen pensar en el partido que les arreglará “sus problemas”, a lo que añaden la cantidad ingente de voto oculto que dicen que cosecha el PP.