Rivera hizo este anuncio en la plaza principal de Rentería, donde Ciudadanos realizó un mitin por la mañana, en el que los dirigentes y cerca de un centenar de simpatizantes de este partido fueron continuamente increpados y estuvieron bajo protección permanente de la Ertzaintza.

La llegada y salida del municipio se produjo bajo escolta de la Policía vasca. Los agentes autonómicos debieron cargar también en varias ocasiones contra los manifestantes independentistas, algunos de los cuales lanzaron huevos, petardos y alguna botella.

La Ertzaintza había dividido la plaza de Rentería mediante un cordón de seguridad, a un lado del cual se situaron los seguidores independentistas, que portaban banderas esteladas catalanas e ikurriñas. Los edificios de la zona tenían también grandes lazos amarillos en sus fachadas.

“HAY QUE SER COBARDE”

A su vez, Ciudadanos había situado el escenario para el mitin en la otra parte de la plaza, donde se colocaron los simpatizantes de este partido, así como sus dirigentes Miguel Gutiérrez, José Manuel Villegas e Ignacio Prendes. También estaban, ya que intervinieron en el mitin junto a Rivera, Joan Mesquida, candidato de Ciudadanos a las elecciones autonómicas de Baleares; la candidata a las europeas Maite Pagazaurtundua y el filósofo Fernando Savater.

Las intervenciones de Rivera, Mesquida, Savater y Pagazaurtundua fueron interrumpidas de forma constante con ruido de cacerolas y gritos de “fascistas, kanpora (fuera)” y “que se vayan, que se vayan”.

En este sentido, Rivera dijo en su intervención, refiriéndose a los manifestantes, que “hay que ser cobarde” para intentar reventar un acto político y no haber condenado en el pasado los asesinatos de ETA que se produjeron en toda España y especialmente en Rentería, uno de los municipios donde más crímenes cometió la banda etarra.

El líder de la formación naranja añadió que el recibimiento a su partido este domingo en esta localidad guipuzcoana probaba que el nacionalismo “es el cáncer de Europa y el cáncer de España”, motivo por el que llamó a la unión de los partidos constitucionalistas y anunció varias medidas al respecto si llega a ser presidente del Gobierno tras el 28-A.

En concreto, dio a conocer que si es presidente tras las generales promoverá un cambio en la Ley de Víctimas del Terrorismo, de forma que se castigue que los ayuntamientos puedan promover o amparar homenajes a terroristas. En la actualidad existe un vacío legal sobre esta cuestión, ya que el Código Penal sólo castiga a las personas y no a las entidades que llevan a cabo este tipo de actos de enaltecimiento.

CONTRA LOS “MATONES”

Asimismo, se refirió a que promoverá una reforma de la Ley Electoral General para que los vascos que salieron de su tierra por la presión de ETA y el nacionalismo puedan votar en sus lugares de origen en las elecciones autonómicas y locales. La idea es que puedan ejercer el derecho al sufragio en la comunidad vasca sin cambiar su lugar de residencia.

El responsable de Ciudadanos afirmó que a estos vascos emigrados por culpa de ETA y el nacionalismo “la democracia les tiene que volver a abrir las puertas”, de forma que “hace justicia” que se realice un cambio legal para que puedan votar en los comicios locales y autonómicos.

Por su parte, Pagazaurtundua tildó de “matones” a los manifestantes y dio las gracias a la Ertzaintza por su protección. La eurodiputada recordó a su hermano, asesinado por ETA. Añadió que quienes les increpaban este domingo en Rentería no asumían el principio democrático de respetar los derechos de los otros, algo por lo que dijo trabaja Ciudadanos.

A su vez, Savater llamó al entendimiento de los partidos constitucionalistas, pero sostuvo que hay que apartar al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, por sus acuerdos con los independentistas. Defendió, en este sentido, que hay partidos “claramente inconstitucionales” con los que no puede llegarse a acuerdos, en clara referencia a las formaciones nacionalistas.