En un mitin en el frontón Astelena de Eibar ante unos 2.000 espectadores, que coincidió con el aniversario de la proclamación de la Segunda República y se celebró en el primer municipio que izó la bandera tricolor, Iglesias presentó el republicanismo como una herramienta para entender la riqueza de la pluralidad territorial y a la vez para que cualquier ciudadano tenga una vida digna.

Según dijo, los valores republicanos, encarnados en unos buenos servicios sociales que atienden independientemente de la ideología o bandera del asistido, “nos unen por encima de ninguna monarquía”, aunque “algunos insensatos repiten la estupidez de que un monarca une a todos los ciudadanos”.

Iglesias, que pronunció su mitin con una ikurriña que le subió una espectadora agarrada de la mano con el micrófono (ayer le hicieron ondear una bandera independentista canaria en el mitin de Las Palmas), quiso recordar que en las elecciones de 2015 y 2016 “la sociedad vasca lanzó por dos veces el mensaje de dar la victoria a Unidas Podemos”.

Y, a partir de ahí, urgió: “Es más importante que nunca que volvamos a obtener esta victoria”. Y, aunque dijo entender (delante del candidato de Podemos, Lander Martínez) que haya muchos vascos que en las autonómicas voten al PSE o a fuerzas abertzales (posiblemente incluyendo a votantes del PNV además de los de Bildu), se mostró convencido de que “saben que ahora es imprescindible que haya una fuerza política en el Estado que asegure que la plurinacionalidad se protege”.