Cae en Cataluña una red de traficantes de marihuana que abastecía parte de la demanda europea

MADRID
SERVIMEDIA

La Policía Nacional, en una operación conjunta con la Policía Criminalística de Serbia, ha desarticulado en Cataluña una red delictiva que abastecía parte de la demanda europea de marihuana.

Según informó la Policía, la operación ha culminado con la detención en la localidad de Abrera (Barcelona) de cuatro personas de origen balcánico. Entre ellas se encuentra el cabecilla de la banda, quien se dedicaba a supervisar el estado de las plantaciones y a asegurar el flujo de los suministros de estas, además de organizar los envíos al extranjero.

En el interior de las viviendas los agentes hallaron dos laboratorios de cultivo artificial y se incautaron de más de 2.000 plantas de marihuana en diferentes fases de crecimiento. Los cuatro detenidos han pasado a disposición judicial.

La investigación comenzó a desarrollarse en verano de 2018, cuando la Policía recibió un informe de la Agregaduría de Interior en Serbia. Este país alertaba de la existencia en Barcelona de varios laboratorios clandestinos empleados para la producción en serie de cannabis en condiciones artificiales.

URBANIZACIÓN EXCLUSIVA

Las indagaciones permitieron localizar en Cataluña dos inmuebles de gran tamaño, tipo vivienda familiar, cuyas características podrían coincidir con las de los laboratorios descritos. Ambas fincas estaban emplazadas en una urbanización exclusiva, donde todos los vecinos eran conocidos y cualquier circunstancia ajena a lo cotidiano alertaría a la organización, dificultando así la labor policial.

La red descubierta era una organización criminal dedicada a la producción de estupefacientes y su tráfico internacional la cual abastecía parte de la demanda europea de marihuana.

Avanzada la investigación los agentes corroboraron que algunos de los miembros de dicha organización residían en las citadas viviendas, y además de encargarse de las plantaciones, ejercían labores de seguridad de las mismas. Estas personas tenían un modus operandi muy hermético, para ello llevaban una vida discreta y mantenían los chalets en estado de aparente abandono, saliendo exclusivamente para llevar a cabo los envíos de la droga.

(SERVIMEDIA)
27 Mar 2019
NBC