La investigación se puso en marcha después de que una patrulla de los Mossos del Área Regional de Tránsito de Tierras del Ebro recibiera aviso de una furgoneta que podría estar estropeada a la carretera N-340, a la alzada del municipio de Tortosa. Cuando los agentes llegaron al lugar, no había ningún ocupante en el vehículo ni en sus immediaciones. Tras hacer las comprobaciones pertinentes, los agentes descubrieron en el interior de la furgoneta, la droga.

Las gestiones policiales permitieron determinar que Isabel B.M, de 53 años, vecina de Cambrils de y nacionalidad alemana, era la encargada de gestionar la distribución de la droga y que Erich B, de 53 años, nacionalidad alemana y marido de ésta, también estaba presuntamente relacionado con el tráfico de estupefacientes.

Este individuo habría mantenido contactos internacionales con varios narcotraficantes a quienes los proporcionaba la logística necesaria por poder introducir la droga a la Península Ibérica. Esta logística consistía en proporcionar un sistema de transporte vía terrestre o marítimo utilizando varias de sus empresas como tapadera. El arrestado, utilizando embarcaciones recreativas de gran potencia, tenía capacidad por introducir la droga vía marítima.