Venezuela
El embajador de Venezuela en España pide al Gobierno que regrese a la "política correcta del diálogo que estaba dando resultados"
- "Si el Gobierno español decidiera retirarme el plácet como embajador, deberíamos actuar en consecuencia", advierte
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El embajador de Venezuela en España, Mario Isea, reclamó este miércoles al Gobierno español que reflexione sobre la conveniencia de recuperar la "política correcta del diálogo" que, a su juicio, "estaba dando resultados".
Así se pronunció el embajador venezolano en una entrevista en TVE recogida por Servimedia, en la que analizó la crisis que se vive en su país después de que el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se autoproclamase "presidente encargado" y la reacción del Gobierno español, que junto con Francia, Alemania y Reino Unido ha dado un ultimátum al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, que expirará el domingo para que convoque elecciones, antes de reconocer a Guaidó como presidente legítimo del país caribeño.
Isea subrayó que es el embajador "legítimamente designado" por Maduro para representar los intereses de su país en España. Por ello, llamó al Ejecutivo a reflexionar sobre la idoneidad de rescatar la "política correcta del diálogo que estaba dando resultados". "Pedimos que se dé una oportunidad al diálogo", dijo.
Añadió que el diálogo promovido por España estaba teniendo "éxito", porque a él se habían sumado México y Uruguay, había sido avalado por el secretario general de la ONU, António Guterres, y el Papa había sugerido la posibilidad de participar como "mediador" del mismo. Esto le sirvió para lamentar el cambio de postura del Gobierno y sugirió la posibilidad de que la reciente visita a Washington del secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe, Juan Pablo de Laiglesia, haya tenido algo que ver con ese bandazo.
PRECEDENTE PERNICIOSO
Isea también comentó los pasos que el Gobierno puede dar en caso de que Maduro no atienda al ultimátum que expirará este domingo. Lo hizo para advertir de que si se "decidiera retirarme el plácet como embajador, deberíamos actuar en consecuencia".
También instó a "no sentar un precedente" que sería pernicioso de cara al futuro, ya que el reconocimiento de Guaidó como presidente venezolano podría llevar a un 'chaleco amarillo' a autoproclamarse como la máxima autoridad francesa ante la Torre Eiffel o pudo animar en el pasado a un manifestante del 15-M a hacer lo propio en España.
Por su parte, comentó que actualmente Venezuela se encuentra en el "centro de un juego de intereses mundial" en el que la "primera potencia militar, económica y nuclear" se encuentra "capitaneando un golpe de Estado" para "apoderarse con los recursos naturales" de su país en su "plan de confrontación" con Rusia y China.
Defendió que en Venezuela "hay democracia", como lo evidencia la celebración de manifestaciones por parte de la oposición a Maduro, y se preguntó si en la España de Franco "se hubiera permitido que un manifestante se autoproclamara" presidente del país en una marcha opositora.
No obstante, matizó que lo que la Constitución de su país prohíbe expresamente es que no se actúe con violencia en tales marchas. Esto le permitió dejar claro que en su país las fuerzas del orden "respetan los derechos humanos" y, añadió, "cuando algún oficial se excede, es enjuiciado".
Por último, lamentó la paradoja de que la comunidad internacional siempre reconozca las elecciones que gana la oposición y desconozca los resultados de los comicios en los que se impone Maduro.
(SERVIMEDIA)
30 Ene 2019
MST/caa