Así se pronunció el jefe de la diplomacia española, en declaraciones a los periodistas a su llegada al Consejo de Asuntos Exteriores de la UE en Bruselas, después de que Torra escribiera el siguiente mensaje en Twitter: “Los catalanes hemos perdido el miedo. No tenemos miedo. No hay marcha atrás en el camino a la libertad. Los eslovenos decidieron seguir adelante con todas las consecuencias. Hagamos como ellos y estemos dispuestos a todo para vivir libres”.

Este paralelismo entre la situación de Cataluña y Eslovenia ha generado fuertes críticas entre distintos líderes políticos, puesto que la independencia eslovena generó una guerra civil con muertos.

Borrell afirmó que las palabras de Torra “no pueden gustar a nadie”. No obstante, recordó que no es la primera vez que los líderes independentistas se pronuncian en términos similares, ya que el Parlamento catalán ha propuesto en distintas ocasiones “seguir la vía de Kosovo” e incluso el presidente de ERC, Oriol Junquera, ha llamado a emular “la vía irlandesa, que abocó a una guerra civil tremenda”.

Reconoció que “a todo el mundo le inquietan este tipo de planteamientos” porque se propalan “con contundencia y retórica”, rememorando que en el pasado los líderes independentistas catalanes han llamado a “pagar el precio más alto que haga falta” o a “no dar un paso atrás”. Esto le llevó a manifestar que con la apelación a la ‘vía eslovena’ “parece que está llamando a la insurrección”.

Respecto a si este tipo de pronunciamientos son susceptibles de provocar la aplicación del artículo 155 de la Constitución, aseveró que “lo que cuentan son las acciones” y enmarcó las palabras de Torra en un contexto marcado por el boicot de los Comités de Defensa de la República (CDR) a los peajes de las autopistas y a la crisis en la cúpula de la Generalitat con motivo de la actuación de los Mossos d'Esquadra.