Un sofá, una televisión, una mesa baja, una alfombra y un cartel gigante imitando el anuncio de un alquiler de casa en una nave vacía. Ese será el escenario donde este viernes CEAR presentará su nueva campaña, en la que denuncia los obstáculos y la discriminación a la que se enfrentan muchos refugiados a la hora de alquilar una vivienda.

La iniciativa se dirige a todos aquellos propietarios que "se escandalizan con las imágenes de las muertes que vemos en el Mediterráneo" pero que nunca habían pensado que el alquiler de su vivienda "puede convertirse en la oportunidad de construir una nueva vida para quienes han tenido que arriesgar la vida para llegar a Europa", apunta CEAR.