Así consta en la propuesta a la que ha tenido acceso Servimedia y en la que se generaliza el acceso de los autónomos a todas las contingencias que antes eran voluntarias, y con ello, la mejora de prestaciones.

En concreto, se abre la posibilidad para todo el colectivo de que las prestaciones vitalicias por incapacidad permanente tengan origen profesional y no se sometan a tributación; que se dupliquen los periodos de tiempo por cese de actividad, y las prestaciones por incapacidad temporal derivada de contingencia común conllevaría el pago, con cargo al cese de actividad, de la cotización del autónomo a partir del tercer mes de baja.

Respecto a la evolución de las bases de cotización, la secretaría de Estado de Seguridad Social apunta que el mantenimiento del poder adquisitivo de las pensiones se consigue revalorizándolas, pero también elevando las bases, y plantea que estas se actualicen en 2019 con la inflación de 2018 (la de noviembre en términos interanuales).

No obstante, aclara que este procedimiento sería provisional hasta que se formalice un acuerdo sobre el nuevo sistema de cotización en base a los ingresos reales.

En cuanto a la tarifa plana, si bien el Gobierno constata que esta cuestión es la más polémica y genera más diversidad de opiniones entre las organizaciones de autónomos, se propone fijar la cuantía de la tarifa plana con la cuantía de la cotización para los contratos de formación y aprendizaje en el Régimen General, lo que supondría una cifra inferior a los 70 euros.

También, a solicitud del autónomo o de oficio por parte de la Tesorería General de la Seguridad Social, se abrirá la posibilidad legal de darse de baja los periodos sin actividad de los afiliados al Régimen de Autónomos con conocimiento previo del interesado y comunicación de la Tesorería.

POSTURAS

A consecuencia del aumento de la base y del tipo de cotización, la Unión de Profesionales y Trabajadores Autónomos (UPTA) calcula que los trabajadores por cuenta propia personas físicas pasarían a pagar unos 18 euros más al mes sobre la cotización actual y la cuota mensual ascendería a unos 296 euros.

En declaraciones a Servimedia, el máximo responsable de UPTA, Eduardo Abad, destacó que esta es una “solución” sobre la que se puede debatir y que con ella se tiene que garantizar la “universalidad de las cotizaciones” para los autónomos.

No obstante, manifestó su desacuerdo con que la incapacidad temporal por contingencias comunes se bonifique a partir del tercer mes y reclamó que esta bonificación se haga a partir del segundo mes.

Abad señaló que estos cambios se tienen que producir independientemente de si se aprueban o no los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019.

Por parte de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), el presidente de esta organización, Lorenzo Amor, declaró que la propuesta del Gobierno supone pagar 260 euros más al año en 2019, unos 21 euros al mes, y que su organización no aceptará este planteamiento.

Amor afirmó que este incremento equivale a la cotización de un mes, que el 70% de los autónomos “no puede pagar más de lo que paga” y “no vamos a permitir que a los autónomos se nos asfixie”. ATA defiende que la subida de la base mínima tendría que ser de 40 euros anuales como máximo.