Así se pronunció el jefe de la diplomacia española, durante su intervención en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados, en la que explicó que desde que el pasado mes de abril se desatara una grave crisis política en Nicaragua como consecuencia de unas protestas contra la reforma de la Seguridad Social, en ese país ha habido "300 muertos, 200 heridos y 2.000 desaparecidos".

Apuntó que a pesar de que el diálogo nacional en Nicaragua está "en suspenso" ese es el "único instrumento que tenemos a mano" y ha de ser, a su juicio, "inclusivo", "respetuoso" y "constructivo" y contar con "acompañamiento internacional" y ser "reforzado" a nivel técnico.

Advirtió de que la crisis en Nicaragua puede llegar a convertirse en una crisis económica para el resto de la región, denunció las últimas decisiones tomadas por el presidente del país, Daniel Ortega, como la expulsión del grupo de derechos humanos de la ONU, y exigió el cese de la represión.

Expuso que la posición española en Nicaragua se fundamenta sobre los siguientes ejes: respeto a los derechos fundamentales, acompañamiento a los organismos internacionales, mantenimiento e incremento de la ayuda al desarrollo y contribución al proceso de institucionalización del país.

Destacó que la Agencia Española de Cooperación Internacional al Desarrollo (Aecid) ha contribuido con 450.000 euros al desarrollo del país, si bien reconoció que "se podría haber hecho más". No obstante, reivindicó que España ha trabajado mucho en la cooperación delegada de la UE, donde ha conseguido una aportación de ocho millones de euros para Nicaragua.

A su vez, explicó que desde el pasado mes de abril Exteriores puso en marcha un plan de emergencia para atender a la colonia española destacada en Nicaragua, que cuenta con 2.414 personas, de las que 2.185 son residentes y el resto transeúntes. Expuso que se han producido casos de españoles amenazados, cuya situación se ha mejorado debido a las gestiones oportunas de las autoridades españoles. Esto le sirvió para anunciar que se procederá a reforzar la misión española destacada en Nicaragua con dos nuevos puestos de diplomáticos.