Ciencia

Hallan en el Sáhara los colores más antiguos del mundo

MADRID
SERVIMEDIA

Un equipo de siete científicos de instituciones de Australia, Bélgica, Estados Unidos y Japón ha descubierto los colores más antiguos en el registro geológico, que son pigmentos rosa brillante de hace alrededor de 1.100 millones de años y que han sido extraídos de rocas en las profundidades del desierto del Sáhara (África).

El estudio ha sido publicado en la revista ‘Proceedings of the National Academy of Sciences’. Para llegar a esa conclusión, los investigadores machacaron las rocas antes de extraer y analizar las moléculas de organismos antiguos incluidos en ellas.

Nur Gueneli, de la Facultad de Ciencias de la Tierra de la Universidad Nacional Australiana, indica que los pigmentos tomados de lutitas negras marinas de la cuenca de Taoudeni (Mauritania) son cerca de 500.000 años más antiguos que los pigmentos descubiertos previamente.

"Los pigmentos rosas brillantes son los fósiles moleculares de la clorofila que fueron producidos por organismos fotosintéticos antiguos que habitaban en un océano antiguo que hace tiempo que desapareció", indica Gueneli.

Los fósiles varían de rojo sangre a púrpura oscuro en su forma concentrada, y son de color rosa brillante cuando se diluyen.

"El análisis preciso de los antiguos pigmentos confirmó que pequeñas cianobacterias dominaron la base de la cadena alimentaria en los océanos hace 1.000 millones de años, lo que ayuda a explicar por qué los animales no existían en ese momento", apunta Gueneli.

Jochen Brocks, también de la Universidad Nacional Australiana, subraya que la aparición de organismos activos de gran tamaño probablemente estuviera restringida por un suministro limitado de partículas de alimentos más grandes, como las algas. "Las algas, aunque todavía microscópicas, son 1.000 veces más grandes en volumen que las cianobacterias y son una fuente de alimento mucho más rica", señala.

"Los océanos cianobacterianos comenzaron a desaparecer hace unos 650 millones de años, cuando las algas comenzaron a diseminarse rápidamente para proporcionar la explosión de energía necesaria para la evolución de ecosistemas complejos, donde los animales grandes, incluidos los humanos, podrían prosperar en la Tierra", concluye Brocks.

(SERVIMEDIA)
10 Jul 2018
MGR/caa