Droga
Los tratamientos por adicción a la cocaína aumentaron en 2017, según Proyecto Hombre
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La cocaína vuelve a ser la sustancia por la que demandan tratamiento más usuarios de Proyecto Hombre, registrando en 2017 una tendencia ascendente con respecto a los datos de 2016, con el 34,3% de los ingresos el año pasado, frente al 31,1% del año precedente. La asociación dio a conocer hoy en Madrid los datos de su Informe 2017, elaborado con datos de su propio observatorio.
El informe fue elaborado tomando como muestra a 2.960 usuarios de los diferentes dispositivos de Proyecto Hombre en España.
Los datos extraídos del informe muestran que la población atendida cuyo principal problema de consumo es la cocaína tiene una edad media de 36,2 años. En cuanto al género, y dentro de unos parámetros de consumo en general similares, los hombres consumen 10,8 veces más cocaína que las mujeres.
La cocaína también es el motivo principal por el que las poblaciones más jóvenes (de los 18 a los 28 años) buscan tratamiento: un 32,3% de quienes acudieron a Proyecto Hombre lo hicieron por cocaína. Esta es también la sustancia más consumida en el grupo de los 29 a los 39 años, con un 44,4%.
La edad media de inicio de consumo de cocaína se sitúa en los 20 años y el periodo de latencia que discurre desde que se inicia el consumo problemático de esta sustancia hasta que comienza el tratamiento se sitúa en 16 años. Frente a otras sustancias, como el alcohol, el cannabis o la heroína, los consumidores de cocaína tardan menos tiempo en solicitar tratamiento.
PERFIL DEL ADICTO
Proyecto Hombre elabora sus perfiles basándose en un conjunto de variables: sexo, edad, nivel de estudios, patrón de empleo y modo de convivencia.
En cuanto al sexo, del total de personas con adicción a la cocaína que acuden a Proyecto Hombre el 88% son hombres y casi un 12% mujeres. Por edad, la media es de 35,7 años (más de la mitad de adictos, el 53,6%, tiene entre 29 y 39 años).
Respecto al nivel de estudios, más del 48% cuenta con estudios básicos, un 43% no tiene estudios y tan solo un 8% tiene estudios universitarios.
El patrón de empleo se caracteriza por trabajo usual en los últimos tres años: el 66% habría estado trabajando a tiempo completo durante los tres años previos al ingreso o en la mayor parte de dicho período. Sin embargo, el porcentaje de personas ocupadas desciende notablemente cuando se trata exclusivamente del mes anterior al inicio del tratamiento. De hecho, en los 30 días previos al inicio del programa, solo el 46% de las personas con adicción a la cocaína tiene en el trabajo su fuente principal de ingresos, mientras que en el caso de las personas con otras adicciones este porcentaje sería incluso menor: un 29%.
Finalmente, el modo de convivencia en los últimos tres años se caracteriza por residir con su pareja e hijos (27,5%), con sus padres (25%) o con su pareja (18,8%).
En resumen, el perfil de la persona con adicción a cocaína se corresponde con el de un varón de unos 35-36 años que o bien vive con su pareja, o pareja e hijos, o con sus padres, dispone de estudios básicos y cuenta con empleo a tiempo completo durante los tres años anteriores a su ingreso, siendo ésta su principal fuente de ingresos, seguida por el apoyo económico del entorno familiar. Una amplia mayoría no padece enfermedades crónicas y no tiene causas judiciales pendientes.
(SERVIMEDIA)
21 Jun 2018
CBV/caa