Crisis financiera
Moral Santín, sobre las 'black': “Una tarjeta de crédito no es el medio para hacer algo opaco”
- “Visto todo lo que ha sucedido, ya les digo que no lo volvería a hacer”, señala
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José Antonio Moral Santín, que ostentó cargos de responsabilidad en Caja Madrid y Bankia, afirmó este miércoles que las conocidas como ‘tarjetas black’ eran una “compensación por esfuerzo y dedicación” de los consejeros, para agregar que una tarjeta de crédito "no es el medio para hacer algo opaco”.
Así lo indicó en la comisión de investigación sobre la crisis financiera de España del Congreso de los Diputados, donde reconoció que el caso de Caja Madrid y Bankia es “complejo y bastante enrevesado”.
Moral Santín fue vicepresidente de Caja Madrid entre 1995 y 2012 y miembro del Consejo de Administración de Bankia entre 2011 y 2012, además de secretario general del Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE) en Madrid y diputado de IU en la Asamblea regional.
Señaló que estas tarjetas, que se manejaron con “toda transparencia”, eran una “compensación por esfuerzo y dedicación”. El medio de pago de esa compensación, que ya existía cuando él llegó en 1995 a Caja Madrid, era una tarjeta de crédito.
Moral Santín fue condenado a cuatro años de cárcel por el caso de las ‘tarjetas black’. Él con la suya gastó alrededor de 450.000 euros, de los que buena parte correspondieron a retiradas de efectivo en cajeros.
“Todos los condenados sin sentencia firme, pues veremos lo que se resuelve al final, heredamos ya el sistema”, expuso, para añadir que no tuvo dudas sobre la corrección de esa tarjeta. En este punto, subrayó que “el medio de pago más transparente y trazable es una tarjeta de crédito”, que deja “huella, rastro y trazo”.
Además, subrayó que las tarjetas de los consejeros estaban contabilizadas y no era una herramienta “discrecional ni arbitraria; era un sistema establecido y recogido en actas”.
Respecto al tratamiento fiscal, comentó que en el “supuesto” de que no hubiera estado incluido en sus declaraciones, el diferencial de lo que tendría que pagar más o menos hubiera sido de 2.000 euros.
Tras las críticas recibidas por los portavoces de los grupos, reconoció que “el sistema que puede ser discutido” y “si estaba mal o bien”. “Visto todo lo que ha sucedido, ya les digo que no lo volvería a hacer; aunque considere que es operativo -el sistema-, tampoco”.
Por otra parte, indicó que en Caja Madrid había “normalmente” tres vicepresidentes en el consejo, y que él era uno de ellos, para agregar que “no tenía funciones ejecutivas” y “no participaba en el comité de dirección”.
A la pregunta de si los consejeros de la entidad tenían conocimientos sobre lo que era, por ejemplo, un balance, una cuenta de resultados o un plan de negocios, dijo que “sí”. “Empezando porque los que venían por parte de la delegación de trabajadores eran gente de banca y duchos” en esos temas, para añadir que el resto de consejeros procedía del “mundo académico”. En este sentido, explicó que él “siempre” ha estado en política pero desde el punto de vista de la “participación” y “siempre lo he compatibilizado con la universidad”.
(SERVIMEDIA)
06 Jun 2018
BPP/gja