Según informó la Policía, los tres identificados llevaron a cabo también “acciones violentas” contra agentes alemanes y pertenecen a “movimientos antifascistas y anarquistas de carácter violento y radical”.

Al mismo tiempo, los agentes llevaron a cabo en entradas y registros en inmuebles de Madrid capital, en concreto dos casas ocupadas del distrito de Carabanchel y un domicilio particular en la calle Bravo Murillo.

Esta operación se llevó a cabo de manera simultánea en varios países europeos y se saldó con la toma de declaración de tres personas en España, así como de tres presuntos implicados en Francia, dos en Italia y uno en Suiza, así como con la práctica de diversos registros domiciliarios en busca de pruebas.

IMPLICACIÓN “DIRECTA”

Según la Policía, este operativo de alcance europeo tenía como fin “identificar a los radicales violentos, pertenecientes a movimientos antifascistas y anarquistas, implicados de forma directa en los graves desórdenes públicos y ataques a la policía ocurridos entre los días 7 y 9 de julio del año pasado en Hamburgo con motivo de la celebración de la cumbre del G-20”.

En España, las investigaciones desarrolladas permitieron acreditar que al menos tres varones, de nacionalidad española y con edades comprendidas entre los 28 y los 31 años de edad, estuvieron presentes en los graves disturbios ocurridos en Hamburgo.

La Policía aseguró que estos tres sospechosos españoles “son autores de importantes daños materiales así como de acciones violentas contra los agentes policiales allí desplegados”. Los investigados pertenecen “a movimientos antifascistas y anarquistas de carácter violento y radical”.

DAÑOS POR 2,7 MILLONES

La operación de este martes en varios países europeos es consecuencia de los graves disturbios que se produjeron en la cumbre del G-20 de Hamburgo en julio del 2017, a la que grupos ultras respondieron con una protesta bajo el lema “Bienvenido al infierno”.

Como consecuencia de las acciones violentas provocadas por estos colectivos radicales, se registraron daños en Hamburgo por valor de 2,7 millones de euros. Las autoridades judiciales alemanas iniciaron un procedimiento penal contra algunos de los presuntos autores por tentativa de homicidio ante la gravedad de los enfrentamientos ocurridos entre los manifestantes violentos y la policía alemana, concentrados sobre todo en la zona del barrio hamburgués de Sternchanze.