Cataluña
Amnistía acusa a la Fiscalía de obstruir las investigaciones de exceso policial el 1-O
- Pide a Interior que retire las pelotas de goma en los antidisturbios

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Amnistía Internacional señaló este jueves que ha documentado casos documentados de “uso excesivo de la fuerza” durante la jornada del referéndum ilegal de Cataluña el pasado 1 de octubre tanto por la Policía Nacional (Unidad de Intervención Policial) como de la Guardia Civil y que “la Fiscalía está incumpliendo su papel de impulsar las investigaciones para aclarar estos hechos”.
En un informe titulado ‘1-O en Cataluña: Obstáculos para la investigación del uso excesivo de la fuerza’, Amnistía señala que, frente a los esfuerzos de varios juzgados por aclarar lo ocurrido, “la Fiscalía está desarrollando acciones tendentes a la descalificación de las denuncias, la obstrucción de diligencias e incluso mostrando una falta de interés en el proceso, dificutlando el esclarecimiento de los hechos por parte de las autoridades judiciales pertinentes”.
Amnistía Internacional subrayó que la Fiscalía intentó mostrar la violencia de manifestantes como “un elemento clave que debería descartar las investigaciones judiciales sobre uso excesivo de la fuerza, presentando vídeos donde se muestra participación de manifestantes en incidentes con las fuerzas de seguridad”.
Además, recalcó que la Fiscalía se opuso a que el Juzgado de Instrucción número 17 ofreciese a personas lesionadas poder personarse en el procedimiento, asegurando que, debido al carácter leve de las lesiones, no cabría investigar de oficio dichos hechos, a menos que la persona afectada formulase una denuncia.
Apuntó que la Fiscalía instó a que sólo se hiciese este ofrecimiento a las personas lesionadas que sin haber denunciado hubiesen tenido que recibir tratamiento médico o quirúrgico, pero no a las que sólo hubiesen precisado una única asistencia facultativa.
“Si a esta actitud preocupante de la Fiscalía se añade la falta de investigaciones internas por parte del Ministerio de Interior en relación a los abusos cometidos el primero de octubre y sus declaraciones exculpatorias de responsabilidad de los agentes en relación con el uso excesivo de la fuerza, la rendición de cuentas por lo ocurrido y el esclarecimiento de los hechos se ponen en riesgo”, manifestó Esteban Beltrán, director de Amnistía Internacional España.
Ocho juzgados catalanes investigan algunas de estas denuncias. Amnistía Internacional indicó que sigue especialmente las diligencias que investigan los tres casos documentados por la organización, en concreto las llevadas a cabo por el Juzgado de Instrucción nº7 de Barcelona sobre 257 denuncias (entre ellas los casos de Roger Español y Alejandra Rayas) y la realizada por el Juzgado de Instrucción nº2 de Girona, que acumula 200 denuncias (entre ellas, las relativas a los incidentes de Aiguaviva).
USO EXCESIVO DE LA FUERZA
Por otro lado Amnistía Internacional recalcó que, si bien las fuerzas de seguridad actuaron con el objetivo de cumplir la orden legítima del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña de impedir la celebración del referéndum, “los agentes hicieron uso peligroso e inadecuado de material antidisturbios, entre ellos, proyectiles de impacto cinético como pelotas de goma, cartuchos de fogueo o sustancias químicas irritantes”.
Desde hace años, Amnistía Internacional viene mostrando su preocupación por el uso de este material antidisturbios en partes de España porque considera que, “aunque no está diseñado para ser letal, es muy impreciso, por lo que en la práctica puede causar lesiones graves e incluso la muerte si se utiliza en distancias cortas”.
“Las pelotas de goma que se están utilizando en España deberían ser prohibidas por ser altamente imprecisas y no contar con protocolos para su uso acordes con los estándares internacionales, que prohíben, entre otras cosas, que puedan utilizarse para dispersar a una multitud”, señaló Beltrán.
Amnistía Internacional documentó el caso de Roger Español, que perdió un ojo por el impacto de una pelota de goma disparada por la Policía Nacional en el cruce de la calle Sardenya con calle Diputació de Barcelona.
Otro caso investigado por la organización sobre uso excesivo de la fuerza con uso inadecuado de sustancias químicas irritantes se produjo en la localidad de Aiguaviva (Girona), donde un agente de la Guardia Civil usó un espray de mano directamente contra personas que se resistían de forma pasiva y pacífica a la operación policial destinada a decomisar las urnas electorales.
También constató el uso de fuerza excesiva contra personas que querían votar en el referéndum y que no representaban ninguna amenaza para los agentes. Es el caso de Alejandra Rayas, que esperaba pacíficamente para votar delante de la Escuela Mediterrània (Barcelona), cuando un agente de la Policía Nacional la golpeó en la cara y el cuello sin razón aparente.
Por otra parte, Amnistía Internacional destacó que la actuación de las fuerzas de seguridad “en ocasiones fue claramente obstaculizada”. Según datos del Ministerio de Interior a fecha del pasdado 9 de de marzo, un total de 58 agentes de la Policía Nacional y 37 de la Guardia Civil habrían resultado heridos como consecuencia de esos impedimentos.
Amnistía Internacional visionó imágenes que muestran algunas actitudes violentas por parte de manifestantes contra agentes, como, por ejemplo, lo ocurrido en el centro de votación de Sant Joan de Vilatorrada (Barcelona), donde un miembro de la Guardia Civil resultó herido después de que le lanzasen una silla.
PETICIONES
Por otro lado, Amnistía apuntó que las autoridades deben adoptar medidas para garantizar que se realizan investigaciones efectivas sobre los casos de uso excesivo de la fuerza, así como asegurar que las víctimas de violaciones de derechos humanos cometidas por la policía el 1-O reciben reparación inmediata y adecuada, incluyendo indemnización, y que este hecho no dependa de la condena penal de los agentes individuales implicados o de que las víctimas presenten una demanda civil en los tribunales.
En este sentido, instó al Ministerio Fiscal a “cambiar radicalmente su actitud y adoptar un rol proactivo en los procedimientos judiciales en curso”, especialmente en los casos graves ocurridos en los incidentes del 1 de octubre, impulsando las investigaciones que actualmente están en marcha.
Además, solicitó al Ministerio del Interior a realizar investigaciones internas para determinar responsabilidades y proceder a la retirada y suspensión del uso de las pelotas de goma que se emplean actualmente en España, ya que “resultan altamente imprecisas y conllevan un alto riesgo de golpear determinadas partes especialmente vulnerables del cuerpo, en particular los ojos, o incluso golpear a otras personas que no sean el objetivo”.
(SERVIMEDIA)
10 Mayo 2018
MGR/gja