Así lo señaló el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, en la rueda de prensa que ofreció en el Palacio de La Moncloa para dar cuenta de los asuntos acorados a la reunión el Consejo de Ministros que presidió el jefe del Ejecutivo.

El también ministro de Educación, Cultura y Deporte respondió así cuando fue preguntado por la falta de sintonía que Sáenz de Santamaría y Cospedal exhibieron en los actos conmemorativos del Dos de Mayo, día de la Comunidad de Madrid.

Es más, hasta el último momento no estaba confirmada la presencia de Cospedal y el Partido Popular había delegado todo el protagonismo en la vicepresidenta y en el vicesecretario general de Comunicación, Pablo Casado.

Sáenz de Santamaría y Cospedal se sentaron en primera fila para escuchar el discurso oficial del presidente en funciones de la Comunidad de Madrid. A pesar de que tan solo les separaba la silla de Ángel Garrido, mantuvieron un semblante serio y apenas cruzaron palabras o miradas.

Tras asistir al desfile militar a las puertas de la Real Casa de Correos, evitaron el cóctel posterior y abandonaron las dependencias del Gobierno de la Comunidad de Madrid raudas y por separado.

Todo ello no hizo más que alimentar los comentarios crecientes en el Gobierno y en el PP sobre la difícil relación entre las ministras, a pesar de una es la mano derecha de Rajoy en La Moncloa y la otra lo es en el partido.

Al ser inquirido por estos hechos, el ministro de Educación, Cultura y Deporte respondió que se trata de respuesta “muy sencilla” porque “no hay ningún problema” que haya que comentar.