Así se expresó Villaseca en la rueda de prensa de presentación de los resultados de la compañía en 2017, evento en el que estuvo acompañado del nuevo presidente ejecutivo de la compañía, Francisco Reynés.

Tras advertir de que dicha propuesta cuestiona la seguridad jurídica, afirmó que “es extremadamente negativo hacer estas medidas” cuando “falta tan poco” para que expiren los plazos de las centrales, entre dos y tres años, y es imposible que las compañías lo recuperen”.

Por otro lado, reveló que la compañía espera un impacto negativo de 40 millones de euros en 2018 como consecuencia de la reducción de la retribución por el alquiler de los contadores.

Preguntado por el impacto adicional que podrán suponer los ajustes propuestos por el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, explicó que la compañía no tiene todavía información para poder calcularlo y recordó que la cifra anunciada por el propio ministro es de un máximo de 50 millones de euros.

En cuanto a las perspectivas para 2018, se mostró confiado con respecto a la evolución de la compañía en mercados como México, Chile, Argentina, Australia o Brasil. En referencia al mercado eléctrico en España, factor que tuvo un impacto negativo en las cuentas del año pasado, destacó que se está produciendo una normalización de la producción hidráulica.

En la misma línea, valoró que ya se están trasladando a los clientes liberalizados los fuertes incrementos del coste de producción de los primeros meses de 2017, lo que también favorece al resultado de este año.

Con todo ello, considera que las perspectivas para 2018 son mejores, ya que a ello se deben sumar los efectos del nuevo plan de eficiencia, que cifra en 105 millones y las plusvalías de la venta del negocio de gas en Italia, de unos 190 millones.