IU y CCOO quieren colocar a Marcelino Camacho como “referente histórico” de la democracia en España

MADRID
SERVIMEDIA

Izquierda Unida y CCOO participarán activamente en una serie de actos a lo largo de este año para conmemorar el centenario del nacimiento del histórico dirigente sindical Marcelino Camacho, al que quieren colocar como “referente histórico” de la lucha por la democracia en España, intencionadamente ocultado, aseguran, por quienes quieren presentar la transición como algo que se fraguó únicamente desde las instituciones por un grupo reducido de dirigentes.

El coordinador general de Izquierda Unida, Alberto Garzón; el secretario general de CCOO, Unai Sordo; el coordinador general del PCE, Enrique Santiago, y el hijo de Marcelino Camacho, Marcel, presentaron en rueda de prensa los actos y los objetivos de ese centenario del que fuera dirigente político y sindical.

El primer acto será el 21 de enero en el auditorio de CCOO que lleva su nombre, con presencia de representantes políticos, culturales y de la sociedad en general, incluida la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena. En primavera se presentará el documental ‘Lo posible y lo necesario’, que resume su militancia política y sindical, que también se podrá contemplar en una exposición itinerante. El 29 de octubre, día de su fallecimiento, un acto solemne reconocerá toda su vida de lucha por las libertades y de los derechos de los trabajadores.

Enrique Santiago se refirió a Camacho como un “patrimonio común de todas las gentes de bien de este país”, aunque su historia es también la del PCE durante la guerra civil, la dictadura, el exilio, la cárcel y la transición a la democracia, una historia de valentía de quien jugó un papel “fundamental” en la elaboración de la Constitución, “que tiene muchos más padres de los que nos quieren presentar” y que no estuvieron en la comisión redactora.

Garzón suscribió esa reflexión y subrayó que la aprobación de la Constitución fue posible gracias a un proceso “vivo” que fue mucho más que “unos cuantos redactores de un documento” y en el que participó mucha gente en las calles y en los centro de trabajo. Sin esa presión, aseguró, “hoy viviríamos en un país mucho más injusto”.

Considera por ello esencial hacer “pedagogía” sobre la figura de Camacho y de otros muchos como él que quedaron en el anonimato, especialmente entre las nuevas generaciones para “hilar” las luchas de entonces con las de ahora.

Unai Sordo aseguró que CCOO “no se entiende” sin Marcelino Camacho, porque fue quien “revivió el movimiento obrero en la oscura noche de la posguerra y el franquismo”. Por ello, dijo, “debería ser un referente histórico en la Historia de España” como una de las personas que han marcado la historia del país en el siglo XX, no solo por su visión de la realidad sino por su talla moral y ética en esa lucha.

EL "MITO FUNDACIONAL" DE LA TRANSICIÓN

Aseguró que Camacho es un “representante inequívoco” de la lucha antifranquista y de la resistencia ante la dictadura, y denunció en ese sentido el “mito fundacional” de que la transición fue posible gracias a la habilidad y valentía de un grupo reducido de dirigentes. El modelo planteado era distinto del que finalmente se fraguó, aseguró, y fueron las movilizaciones de los trabajadores, la lucha del movimiento obrero, las que “corrigieron el rumbo” y forzaron que la historia se escribiera como finalmente se escribió.

En ese sentido, Marcel Camacho recordó que tres generaciones de su familia, y espera que no haya una cuarta, han pasado por la cárcel por defender las libertades en España, y reconoció que le “choca” que cuando se celebra la Constitución en las instituciones no se habla de las marchas de trabajadores que desde finales de los años sesenta presionaban por hacer realidad los derechos fundamentales.

Esas luchas, y la de quienes pasaron años en la cárcel, como su padre, “se ha ocultado” al contar la transición, y se ha hecho “intencionadamente para configurar una imagen que alguien quería”. Lo que quieren con este centenario, aseguró, es “poner en su sitio” el papel de centenares de trabajadores como Marcelino Camacho.

Marcel aseguró que el título del documental sobre su padre sintetiza la contradicción que siempre tuvo en vida y que sigue marcando la lucha obrera: él siempre tuvo presente “lo posible” como concesión a las circunstancias de cada momento, pero siempre optó por “lo necesario”, entendido como “lo que debes hacer” para satisfacer las necesidades de la mayoría por la que se lucha, y que comporta “un sacrificio enorme”.

Explicó, a modo de ejemplo, que su padre tuvo la oportunidad de huir antes de ser detenido en 1967, porque el régimen “ya no le puede tener en la calle” ante la sucesión de “algaradas de trabajadores” pero lo que busca es “que se marchara” y que no diera la cara. Sin embargo, él mismo compareció cuando le buscaron y pasó 10 años en prisión, “hasta que se murió el que se murió en la cama, desgraciadamente”. Después, recordó, en 1976, con la transición ya en marcha, Manuel Fraga le encarceló tres meses.

Marcel recordó que cuando su padre murió el entonces alcalde de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, aseguró que Marcelino Camacho tendría una calle en la capital, pero 10 años después sigue sin ser una realidad por las denuncias contra las pretensiones del Ayuntamiento. Por ese motivo, el sábado 27 de enero han convocado una manifestación para reclamar esa promesa en la zona donde siempre vivió, en Carabanchel, en un piso del que hubo que sacarle cuando enfermó porque no tenía ascensor.

(SERVIMEDIA)
12 Ene 2018
CLC/caa