Zaplana anunció que el PP ha solicitado la comparecencia del presidente del Gobierno en el pleno de la Cámara Baja para que explique su afirmación del viernes pasado de que estamos asistiendo al "principio del fin" de ETA y para que dé cuenta de los cambios operados en la política antiterroristas del Ejecutivo.

Desde el PP se destaca que tanto el PSOE como el presidente del Gobierno han faltado a la verdad cuando afirmaban que mantenían informados al resto de partidos sobre este asunto e insistióen que "en la lucha contra ETA no se trata de jugar a empates. Hay que ganar".

Aunque en principio la petición de comparecencia del presidente es para que se explique en el pleno, Zaplana no descartó ningún otro ámbito parlamentario para recibir información, lo que incluye la posible comparecencia en la Comisión de Secretos Oficiales. "Que elija donde quiere comparecer", insistió.

Los populares recuerdan a Zapatero que en varios debates parlamentarios, incluido el último Debate sobre el Estado de la Nación, se comprometió a compartir información con otros gruposparlamentarios y le pidieron que "sea leal a su palabra".

LEALTAD

"Ya sabemos que no ha sido leal a la Constitución, no ha sido leal al Pacto Antiterrorista, pero le pedimos que lo sea, al menos, a su propia palabra. Tenemos derecho a saber dónde nos está embarcando", dijo Zaplana.

Los populares insisten en saber cuál es el precio político que el Gobierno está dispuesto a pagar por la paz

El portavoz popular se refirió también a la ausencia de Zapatero del Congreso Internacional de Víctimas del Terrorismo, que "es, sin duda, un declaración de intenciones". De hecho, acusó al presidente de "evitar a las víctimas y tender la mano reiterdamente a ETA".

"El panorama no es bueno", sentenció, "con un presidente que está más pendiente de los terroristas que de las víctimas, y que casi va suplicando una tregua".

El PP sospecha que, al igual que anteriores gobiernos socialistas mantuvieron en secreto la guerra sucia contra ETA, a este dirigido por Rodríguez Zapatero "lo que le pasa es que lo que hace no se puede contar".

Zaplana se negó a decir si en caso de que ETA abandonara las armas mantendría su afirmación hecha durante la última tregua de la banda terrorista, que el gobierno del PP aprovechó para iniciar negociaciones con ETA, de que la "democracia sabría ser generosa"

Sólo cuando se produzcan las decisiones correspondientes por parte de ETA "ya valoraremos y opinaremos". "Lo inaudito", continuó. "es que sea la democracia la que claudique por anticipado y suplique una tregua, sobre todo cuando el principio del fin estaba ya cerca" gracias a la política puesta en práctica por el PP.

Insistió en que ningún ciudadano va dejarse convencer de que los gobiernos del PP no combatieron con todas sus fuerzas el terrorismo. Además, se manifestó convencido de que el camino iniciadopor el PP en la lucha antiterrorista es el único seguro para acabar con ETA, y eso lo avala el hecho de que durante la tregua, el Gobierno de José María Aznar quiso "comprobar si sus intenciones eran sinceras y en cuando vimos que no lo eran, ¡a por ellos!".