El líder socialista intervino en una jornada organizada por el PSOE para analizar y debatir las propuestas en materia de Educación y Cultura que incorporarán a su programa para las elecciones generales del próximo 14 de marzo.

Su promesa es alcanzar un gran compromiso social con todos los sectores implicados para convertir la Educación en la primera prioridad de España. Para ello, en cuatro ños se alcanzaría el gasto medio de la Unión Europea en esta materia, y se desarrollaría un nuevo modelo de financiación universitaria que alcance el 1,5 por ciento del PIB.

Con ese aumento de recursos los socialistas proponen una serie de reformas que persiguen tres objetivos: prevenir el fracaso escolar y el ausentismo, implicar a todos los sectores sociales en la educación de los ciudadanos, y aumentar la autonomía de los centros para una educación más personalizada y no segregadora.

Entre lasmedidas concretas, los socialistas se comprometen a que todo alumno esté en condiciones de manejar con fluidez el inglés al concluir la educación obligatoria, para lo cual se desarrollarían en esta lengua una tercera parte de las actividades escolares en el ciclo primario.

Incluyen en estas reformas un aumento del número de becas, de su cuantía y de su duración hasta llegar en diez años a la media europea, para que todo joven con voluntad y capacidad pueda acceder a la Universidad sea cual sea su rent o lugar de residencia, llegando en ese tiempo a un cuarenta por ciento de estudiantes becados en los niveles posobligatorios. La tercera medida es la equipación de todos los centros de enseñanza con un ordenador por cada dos alumnos a partir de los ocho años.

Proponen además aumentar las plazas de primer ciclo de educación infantil hasta alcanzar a 300.000 familias y ampliar el número de horas en la educación (una más al día en primaria y tres más por semana en secundaria) para mejorar el rendimiento garantizando en ambos casos una hora de lectura diaria.

También quieren que los centros escolares estén abiertos doce horas al día, siete días a la semana y once meses al año para atender las necesidades de las familias, limitar a quince los alumnos por aula en los centros ubicados en zonas especialmente desfavorecidas, e implicar a los concertados en la atención a todo tipo de alumnos.

Se comprometen a que en 2010 el 85 por ciento de los jóvenes estudie Formación Profesional o en la Universidad gracias también a un nuevo Estatuto de la Función Docente con incentivos profesionales, nuevos planes de formación y promoción del profesorado, y medidas para rejuvenecer las plantillas.

MAS CULTURA EN LAS TELEVISIONES

Rodríguez Zapatero anunció también la creación de un nuevo Ministerio de la Cultura y la Comunicación con un presupuesto "coherente" encargado de fomentar la creación artística y difundir dentro y fuera del Estado la riqueza y la diversidad cultural de España, una tarea en la que se mplicarían los medios públicos de comunicación.

Por ejemplo, proponen crear un canal digital de libre acceso con contenido exclusivamente cultural y educativo, y el restablecimiento de una programación infantil en los horarios oportunos.

Para evitar una nueva fractura social causada por las nuevas tecnologías, el PSOE garantiza que todas las personas menores de cuarenta años que lo deseen dispondrán de conocimientos suficientes de informática, al menos a nivel básico de usuario y para la navegacin por internet.

En este sentido, garantizan el acceso libre a internet para todos los ciudadanos del Estado, y la duplicación del ratio actual de libros por habitante en las bibliotecas públicas para equipararlo al nivel europeo.

La ampliación del acceso a la cultura pasaría también por reducir al 4 por ciento el IVA aplicado a los bienes culturales musicales y al 1 por ciento el de libros y publicaciones escritas.

CINE ESPAÑOL

Un aspecto en el que Rodríguez Zapatero hizo especial hincapiées la necesidad de reforzar el apoyo a la distribución, la exhibición, la promoción y el consumo cinematográfico en los distintos soportes y canales, con el incremento de las cuotas de pantalla para la producción audiovisual española y europea, y el establecimiento además de cuotas fijas de taquilla.

Los socialistas quieren que la televisión pública se implique "mucho más activamente" en la defensa del cine español y recuperar los programas de música en directo producida en España, con cuotas de emisin.

También se comprometen a fomenar la edición, distribución y exportación de libros escritos en las diferentes lenguas del Estado, primando a las pequeñas y medianas editoriales y a las que promocionen a nuevos talentos, y a respaldar la difusión internacional de las producciones culturales españolas a través de un Instituto para la Producción Artística y los Servicios Culturales.

Para fomentar la creación artística, el PSOE propone incorporar al currículo escolar al menos una asignatura de prácica o creación por curso, crear el Consejo de las Artes y las Culturas como espacio independiente de coordinación, propuesta y consulta, y legislar de forma efectiva la persecución de la piratería cultural organizada.

Rodríguez Zapatero desgranó todos estos compromisos en un discurso plagado también de reproches a la política educativa y cultural del Gobierno del PP, que definió de "sopor" en un primer momento y de "ardor reaccionario" después. Denunció la "miopía" de los populares por haber atendido ólo a un desarrollo económico basado en el ladrillo y haber descuidado la educación y la cultura como factores de los que depende un crecimiento estable, justo y prolongado. "No han sido sólo conservadores, han sido sobre todo imprevisores", aseguró.

Señaló los gobiernos de Felipe González como las etapas de mayor expansión educativa y cultural, y reiteró que la educación y la cultura pueden contribuir como ningún otro factor a la cohesión social y territorial del Estado al garantizar una formación coún para todos los ciudadanos, basada en los elementos que unen a todos los españoles.

El líder socialista contrapuso sus propuestas con las del PP al asegurar que las fábricas y factorías dan prosperidad al país y crean empleo, pero la existencia de España como tal no depende de ellas, sino de la existencia de una cultura común en cuya defensa prometió ser "beligerante".